Cómo cuidar mi piel

¿No cuidas tu piel porque no sabes que tratamiento necesita? Te contamos cuáles son los diferentes tipos de piel y cómo cuidarla de manera adecuada.

Conocer tu tipo de piel es necesario para elegir el tratamiento apropiado que tu cutis necesita y así mejorar su aspecto.

Puedes tratar correctamente cada tipo de piel siguiendo estos 4 pasos: Limpiar, tonificar, hidratar y exfoliar

Piel grasa. Es brillante y de textura gruesa, se aprecia el tamaño del poro porque es dilatado y profundo, y el tono de la piel tiene un matiz cetrino. En caso de ser sensible puede presentar alguna rojez difusa.
Piel seca. Apagada y de textura fina, con capilares visibles, el poro es prácticamente inapreciable y el tono de la piel tiene un matiz grisáceo normalmente tirando a pálido. En caso de ser sensible puede presentar rojez.
Piel normal. Piel tersa y sana, de grosor medio y turgente, el poro es perceptible pero no dilatado y al tacto es suave y aterciopelada. Este tipo de pieles también pueden presentar granitos puntuales, manchas o deshidratación, pero siempre la trataremos con productos destinados a pieles normales.

La maquilladora Cristina Lobato, nos cuenta cómo tratar correctamente cada una de ellas siguiendo estos 4 pasos: Limpiar, tonificar, hidratar y exfoliar.

¿CÓMO TRATAR UNA PIEL GRASA?

Limpiar. Es un paso esencial. En caso de tener problemas de acné, recomienda utilizar un limpiador facial con árbol de té, por sus propiedades antibacterianas y cicatrizantes.
Tonificar. Aplicar tónico para reequilibrar el pH de la piel tras el uso del limpiador y para ayudar a cerrar el poro. Su función es eliminar cualquier tipo de impureza o suciedad que no haya eliminado el limpiador.
Hidratar. Se trata también de un paso muy importante en este tipo de pieles ya que existe un desequilibrio, la grasa se tiene muy alta y la hidratación muy baja. Es fundamental utilizar cremas hidratantes que aporten hidratación y que además ayuden a dar un efecto calmante y refrescante en la piel.
Exfoliar. Recomienda exfoliar y ponerse una mascarilla, una vez a la semana.

Conocer tu tipo de piel es necesario para elegir el tratamiento apropiado que tu cutis necesita y así mejorar su aspecto

¿CÓMO TRATAR UNA PIEL SECA?

Limpiar. Utilizar productos limpiadores en crema y si son productos en gel, mejor que contengan aceites y sean libres de detergentes. Las leches limpiadoras también funcionan muy bien para este tipo de pieles.
Tonificar. Con tónicos de hidratación y libres de alcohol.
Hidratar. Aplicar sérum en textura aceite. Este gesto ayudará a aportar elasticidad en la piel y a notar mayor confort.
Mascarilla. Utilizar una Mascarilla hidratante o nutritiva, una o dos veces a la semana.

¿CÓMO TRATAR UNA PIEL NORMAL?

Limpiar. Limpiar con leche limpiadora o producto jabonoso, la textura en leche o jabón dependerá de gustos personales.
Tonificar. Aplicar tónico para pieles normales, que hagan la función de equilibrar el pH de la piel y eliminar los restos de suciedad que el limpiador no haya conseguido retirar.
Hidratar. Se puede utilizar cualquier hidratación que contenga vitamina C, Aloe Vera, hialurónico, cualquier componente es válido.
Mascarilla. Utilizar una Mascarilla hidratante, una o dos veces por semana.