Microinjerto capilar, una forma de poblar las cejas y rejuvenecer la mirada

La clínica Bonome utiliza el injerto pelo a pelo mediante la técnica FUSS como técnica quirúrgica.

Microinjerto capilar.
Microinjerto capilar.
Estetic
26 septiembre 2017 | 12:00 h

De un tiempo a esta parte, las cejas se han convertido en una parte importantísima de la estética facial. “Hace años, las modas y tendencias las habían reducido a la mínima expresión. Hoy en día, lucir unas cejas pobladas y con una bonita forma, es un signo más de belleza”, afirma la  doctora García Bonome.

Con la técnica de micro-trasplante capilar, ya no hace falta recurrir a métodos antinaturales como la micropigmentación o delineado permanente para repoblar o reconstruir las cejas. Hoy en día, la utilización de injertos capilares es la alternativa para recobrar la belleza y la estética de la cara.

Eso sí, al margen de las modas, existen múltiples causas que pueden provocar la pérdida de la totalidad o parte de las cejas. Algunas de las más comunes son las enfermedades autoinmunes como el lupus, quemaduras, enfermedades infecciosas como la sífilis, enfermedades tiroideas, hábitos nerviosos, radioterapia, sesiones de quimioterapia, entre otras.

Los microinjertos para las mujeres se extraen del área encima de las orejas, mientras que en el caso de los hombres se adquiere del área occipital

La reconstrucción de la carencia de pelo en las cejas es una técnica que debe adaptarse a las peculiaridades de cada paciente. De hecho, puede ser parcial o total.

Para reconstruir las cejas, la Clínica Bonome utiliza el injerto de pelo a pelo mediante técnica FUSS como técnica quirúrgica. El número de injertos necesarios para este tratamiento ronda entre los 70 a 300 por ceja, aunque en el caso de las mujeres, se necesita un número inferior.

Concretamente, los microinjertos capilares para las mujeres se extraen del área justo encima de las orejas donde el pelo es mucho más fino, mientras que el caso de los hombres, se adquiere del área occipital, donde el pelo es más grueso.

A continuación, los folículos extraídos se injertan en la zona de la ceja a repoblar respetando el grado de angulación del crecimiento del pelo. Se trata de un procedimiento completamente personalizado e indoloro. En cuanto a los resultados, éstos son visibles a partir del tercer mes. El tratamiento se realiza bajo anestesia local y tiene una duración de tres horas aproximadamente.

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