En un contexto de incertidumbre y hartazgo derivados de la pandemia que nos ha tocado vivir, cada vez más personas acuden a los centros de belleza con pieles completamente alteradas.
Además de realizar un diagnóstico exhaustivo de las causas que originan esa alteración, María Pérez de Villamil, directora del Centro Mem, ha ideado un protocolo completamente personalizado que, entre otras pautas, incluye la aplicación de un cóctel de activos entre los que se encuentra la ''planta de la resurrección'', ideal para tratar pieles maduras y apto para las más reactivas.
Generalmente, una piel estresada presenta unos mecanismos de defensa deteriorados y un pH alterado. El cutis pierde luminosidad, presenta un tono apagado, e incluso poros obstruidos, al aumentar a segregación de grasa. Otro signo que alerta de que estamos ante una piel estresada es la deshidratación, y como consecuencia, las arrugas y las líneas de expresión se acentúan. También lo harán las bolsas y ojeras, si el estrés origina alteraciones en la rutina de sueño.
Para mejorar y corregir este tipo de pieles estresadas, en una primera fase, un equipo multidisciplinar el Centro Mem realiza un diagnóstico integral de la piel a tratar. Dependiendo de cada caso, podrá intervenir un nutri-coach, e incluso somerterse a test genéticos y/o epigenéticos, ya que según estudios recientes la alteración de la epigenética de la piel puede tener un gran efecto en su rejuvenecimiento o, de alguna forma, mejorar el normal proceso degenerativo.
Generalmente, una piel estresada presenta unos mecanismos de defensa deteriorados y un pH alterado
Una vez realizado el diagnóstico y en base a este, se personaliza el protocolo, teniendo en cuenta que estará basado en un cóctel a medida de principios activos con prebióticos y probióticos que regulan el microbioama de la piel.
Entre ellos se incluye extracto de la planta Myrothmamnus flabellifolia, la llamada ''planta de la resurrección'' un novedoso activo del llamado ''sérum de la resurrección'', que el Centro Mem acaba de incorporar en sus tratamientos. Se trata de un revolucionario y potente antiaging apto para pieles sensibles, que no existía hasta ahora en el mercado y que permite tratar pieles maduras y reactivas.
El sobrenombre viene por la habilidad única de la planta para volver a la vida en cuestión de horas después de que se haya secado (aunque no haya visto una gota de agua en muchos años). La planta de la resurrección tiene un alto contenido en polifenoles y es un poderoso protector contra los radicales libres. El Resurrect Serum aprovecha el poder de los probióticos y la biotecnología para proveer altos niveles de hidratación y efectos antiarrugas para reducir las líneas de expresión, reafirmar y elevar la piel.
A continuación, para una completa absorción e inonización del cóctel de activos, se da paso a la aplicación de tecnología de corrientes continúas de alta y media intensidad, que además oxigenará la piel.
El tratamiento finaliza con la aplicación de la mascarilla Omega Mask K12, que actúa como un potente reconstitiuyente de la piel y sus alteraciones. Su mezcla de probióticos, activos y omega 3,6 y 9, restauran y acomodan la piel seca y estresada. Su fórmula, Biome+2 contiene un extracto de Lactoacilus que cambia positivamente la población microbiana hacia una piel sana y radiante.