Yogur natural, fruta o bocadillos de pan integral: algunas de las opciones de meriendas infantiles

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomiendan que los niños consuman cinco comidas al día: desayuno, comida, cena y dos meriendas

Meriendas saludables en colegios (Foto. Freepik)
Meriendas saludables en colegios (Foto. Freepik)
27 septiembre 2022 | 10:00 h

La vuelta al cole para los más pequeños ha llegado. Y con ella, el momento de comenzar a pensar en las mejores opciones de meriendas para llevar al cole,  combinando una correcta alimentación con comidas que les gusten. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomiendan que los niños consuman cinco comidas al día: desayuno, comida, cena y dos meriendas (una en el colegio y otra cuando salen del mismo). Sin embargo, en muchas ocasiones, la falta de tiempo hace que los padres y madres recurran a las tradicionales meriendas que para nada son saludables.

Como sabemos la dificultad que tiene escoger la merienda, hemos hablado con quienes más saben sobre el tema y lo hemos apuntado todo todito para resolver tus dudas.

“Sin duda, incluiría una pieza de fruta, troceada o entera, acompañada de unos frutos secos o de un yogur natural. Otras opciones también muy saludables pueden ser bocadillos con base de pan integral. Aquí van algunas ideas de bocadillo: hummus y pimiento asado, de crema de cacahuete y trocitos de manzana, queso de untar y nueces, aguacate y tomate, tomate y queso, tortilla francesa y tomate rallado. Podemos llevar también un pequeño tupper con tomates cherry, palitos de zanahoria y unos trocitos de queso o picos integrales acompañados de unas onzas de chocolate. Y de forma ocasional, también podemos optar por una porción de bizcocho de yogur con harina integral, bizcocho de plátano o unas galletas caseras de avena y plátano. Hay un sinfín de opciones”, explica Carolina García, fundandora de la clínica de nutrición Lanatu.

La etapa escolar es fundamental para el correcto desarrollo cognitivo y físico, por eso una de las claves, además del deporte, es la alimentación. Se trata de una etapa en la que los niños aprenden, establecen hábitos y descubren. “En esta etapa, es fundamental una alimentación basada sobre todo, en hortalizas y frutas, rica en legumbres, frutos secos naturales o tostados, consumiendo alimentos integrales en lugar de procesados, optando por lácteos naturales sin azúcar, reduciendo el consumo de ultraprocesados ricos en sal, azúcar y grasas saturadas y el consumo de refrescos y zumos”, apunta la especialista.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomiendan que los niños consuman cinco comidas al día: desayuno, comida, cena y dos meriendas

¿Y los famosos calendarios de meriendas? ¿Son recomendables? Con el objetivo de establecer rutinas saludables, desde los colegios proponen a padres y madres calendarios donde establecen que tipo de alimento deben llevar cada día de la semana: lunes lácteos, martes bocadillo, miércoles fruta, jueves bocadillo y viernes día libre. “En realidad, no importa tanto la rutina en sí, lo más interesante es que se elija una opción saludable dentro de ese esquema propuesto. Por ejemplo, el día que toca llevar lácteo, elegir una botellita de leche entera o un yogur natural, en lugar de un batido azucarado de chocolate”, informa Carolina.

TRAS EL VERANO… CUESTA VOLVER A LA RUTINA

Sin duda el verano es la época del año en la que mayores excesos se producen, ya sean las personas adultas o los más pequeños, todos hemos pecado en estos meses y hemos comida más de un helado, bebido alguna que otra copa o tomado más chuches de las que deberíamos. Y con la llegada de septiembre, la vuelta a la rutina se nos hace cuesta arriba… Carolina nos da las claves para volver a nuestra antigua alimentación.

Yogur natural, fruta, bocadillos de pan integral, galletas de avena: algunas de las opciones de meriendas infantiles saludables 

“Simplemente, volviendo poco a poco a la rutina de horarios, practicando deporte y abandonando el sedentarismo, planificando los menús semanales y muy importante, en la medida que sea posible, haciendo partícipes a los niños de todo el proceso de su alimentación desde la compra hasta la cocina. De esta forma, poco a poco, se puede ir creando una buena base de hábitos saludables”.

¿Y los niños que son “malos” para comer? En estas situaciones, los padres tienen un papel clave. “Enfocarnos sobre todo, en que los adultos tenemos que ser el modelo a seguir por los niños (tendríamos que ser un ejemplo en la comida y en la actividad física). Y, además, debemos tener responsabilidad de que alimentos entran en casa, saber gestionar las raciones y la ingesta del menor, enfocar las normas en la mesa de forma positiva, usar la imaginación y hacer partícipes a los niños de la comida, experimentar con ellos en la cocina, probar texturas y sabores nuevos, llevándolos siempre al juego y empezar a crear esa convertir base sólida en torno a la alimentación saludable”

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.