¿Cómo detectar la alergia al sol?

Los signos y síntomas se presentan únicamente en la piel​ que ha estado expuesta al sol y suelen manifestarse a los pocos minutos o a las horas después de la exposición solar

Alergia al sol (Foto. Freepik)
Alergia al sol (Foto. Freepik)
Lorena García - Redactora
3 enero 2022 | 14:00 h
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La alergia al sol es un término que se utiliza a menudo para describir una serie de enfermedades en las que se produce un sarpullido con picazón en la piel que estuvo expuesta a la luz solar. La forma más común de alergia al sol es la erupción polimorfa lumínica, también conocida como alergia solar.

Los casos leves de alergia al sol pueden desaparecer sin tratamiento. Los casos más graves pueden requerir tratamiento con cremas o pastillas esteroides. Las personas que tienen una alergia al sol grave pueden necesitar tomar medidas preventivas y usar ropa que las proteja del sol.

El aspecto de la piel afectada por la alergia al sol puede variar ampliamente según lo que cause el problema. Entre los signos y síntomas pueden encontrarse enrojecimiento, picazón o dolor, pequeños bultos que pueden convertirse en manchas elevadas, descamación, costras o sangrado, así como ampollas o ronchas.

Los casos leves de alergia al sol pueden desaparecer sin tratamiento. Los casos más graves pueden requerir tratamiento con cremas o pastillas esteroides

Por lo general, los signos y síntomas se presentan únicamente en la piel que ha estado expuesta al sol y suelen manifestarse a los pocos minutos o a las horas después de la exposición solar.

PREVENCIÓN

Si tienes una alergia al sol o una mayor sensibilidad al sol, puedes ayudar a prevenir una reacción al seguir estos pasos:

  • Evita el sol durante las horas pico. Intenta mantenerte fuera del sol entre las 10 y las 16 horas.
  • Evita la exposición repentina a mucha luz solar. Muchas personas tienen síntomas de alergia al sol cuando están expuestas a más luz solar en la primavera o el verano. Aumenta gradualmente la cantidad de tiempo que pasas al aire libre para que las células de tu piel tengan tiempo de adaptarse a la luz solar.
  • Utiliza gafas de sol y ropa protectora. Las camisas de manga larga y los sombreros de ala ancha pueden ayudar a proteger tu piel de la exposición al sol. Evita las telas que son delgadas o que tienen un tejido suelto; los rayos UV puedan pasar a través de ellas.
  • Usa protector solar. Usa un protector solar de amplio espectro con un FPS de al menos 30. Aplica el protector solar generosamente y vuelve a aplicarlo cada dos horas, o más a menudo si estás nadando o sudando.
  • Evita los desencadenantes conocidos. Si sabes que una determinada sustancia provoca la reacción de tu piel, como un medicamento o el contacto con la chirivía o las limas silvestres, evita ese desencadenante.
Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
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