Las uñas son un indicador de la salud y pueden reflejar la presencia de muchas enfermedades. El doctor Juan Jiménez Cauhé, especialista en Dermatología del complejo hospitalario Ruber Juan Bravo, explica que una de las patologías más frecuente es la onicomicosis, es decir, hongos. Según el experto, suponen aproximadamente la mitad de los motivos de consulta relacionados con las uñas y se estima una prevalencia de 5-10% en la población general.
La uña encarnada tiene una prevalencia aproximada del 5% en la población general, siendo más frecuente en hombres y en personas jóvenes que hacen deporte
También, las uñas frágiles afectan hasta el 20% de la población general y hasta 30% en el caso de mujeres (en las que es mucho más frecuente). Las causas más comunes de unas uñas débiles y quebradizas son: una alimentación pobre en vitaminas y minerales, diversas enfermedades, abuso de productos de limpieza abrasivos sin la debida protección (guantes), manicuras y esmaltes agresivos, y morderse las uñas de forma habitual, destaca Rocío Escalante, titular de Arbosana Farmacia y experta en dermocosmética.
Por otro lado, la uña encarnada tiene una prevalencia aproximada del 5% en la población general, siendo más frecuente en hombres y en personas jóvenes que hacen deporte.
Asimismo, existe otra patología muy frecuente y es la leuconiquia, que corresponde a vetas o puntos blancos en las uñas que se deben, a menudo, a medicamentos o enfermedades.
Por último, la uña en pinza, tal y como explica el doctor Juan Jiménez Cauhé, se da en aproximadamente el 1% de la población y afecta sobre todo a mujeres de edad media-avanzada. Se asocia a artrosis y a defectos en la forma de los pies o de la pisada y consiste en que la uña se curva y adquiere una forma cónica, como una teja, produciendo dolor.