Medicina Familiar y Comunitaria, una asignatura poco homogénea y que no existe en siete facultades

La Medicina Familiar se aborda de manera muy diferente en las distintas universidades españolas, hasta el punto de que hay siete facultades en las que ni tan siquiera se imparte: En las que sí lo hacen. tiene una duración media de 5 semanas

Jóvenes médicos durante sus prácticas (FOTO: Freepik)
Jóvenes médicos durante sus prácticas (FOTO: Freepik)
Manuel Gamarra
20 octubre 2023 | 17:45 h

Para este curso 2023/2024 las universidades públicas y privadas españolas han ofertado, en total, 8.367 plazas de Medicina, 955 más que el año anterior. La inmensa mayoría de estos nuevos estudiantes se encontrarán en algún momento de la carrera con una asignatura enfocada a la Medicina de Familia, pero hay hasta siete facultades que no la contemplan en su plan de estudios.

Así lo refleja el 'Primer Informe del Observatorio de la Academia de Medicina Familiar y Comunitaria de España (AMFE) en la universidad española, 2023', que señala además que en dos universidades de las 41 analizadas la asignatura es optativa. El análisis, elaborado por semFYC, incluye así a 41 de las 44 facultades de Medicina que hubo en España durante el curso académico 2022/2023.

"Aún estamos lejos del nivel en el que se encuentran las universidades de otros países”

De esta manera, como indica el citado informe, la asignatura de Medicina Familiar y Comunitaria está implantada en 34 de las 41 universidades analizadas (82,9%), y es obligatoria en 32, lo que supone un 78% del total. En concreto, las que no imparten la asignatura de Medicina Familiar y Comunitaria son la Universidad de Málaga, la Universidad de Oviedo, la Universidad de Cantabria, la Universidad de Barcelona, la Universidad Rovira i Virgili, la Universidad Rey Juan Carlos y la Universidad del País Vasco. Todas ellas son públicas.

“Se observa una progresión de la MFyC en la universidad en asignaturas, contenidos y profesorado, pero aún estamos lejos del nivel en el que se encuentran las universidades de otros países”, critica AMFE, señalando como debilidades la “gran heterogeneidad en denominación, contenidos, metodologías, carga docente y estructura”, y como fortalezas la “implementación de metodologías docentes y evaluativas innovadoras”.

UNA CARRERA MUY POCO HOMOGÉNEA

Cabe destacar que para el curso 2023/2024 ha iniciado su andadura el grado de Medicina de la Universidad Fernando Pessoa de las Palmas, de la Universidad Camilo José Cela y de la Universidad de Alicante. Esta última incluye la asignatura en quinto curso, eso sí, bajo el nombre de ‘Medicina Familiar y Comunitaria. Geriatría y Cuidados Paliativos’... y es que solo se denomina Medicina Familiar y Comunitaria en 14 facultades -menos de la mitad-, mientras que en el resto, como en la de Alicante, está asociada -y comparte horas de formación- con otras disciplinas médicas.

Así, las facultades de Medicina que dedican por entero una asignatura a la Medicina Familiar y Comunitaria son la Universidad de Jaén -donde todavía no se ha impartido por la reciente creación del grado-, la Universidad de las Illes Balears, la Universidad de Castilla-La Mancha, la Universidad de Valladolid, la Universidad Internacional de Cataluña, la Universidad Autónoma de Barcelona, Universidad Miguel Hernández, la Universidad Jaume I, la Universidad Católica de Valencia San Vicente Mártir, la Universidad de Extremadura, la Universidad de Santiago de Compostela y la Universidad de Murcia, la Universidad del País Vasco y la Universidad Autónoma de Madrid.

La asignatura solo se denomina Medicina Familiar y Comunitaria en 14 universidades

Por este motivo, existe una gran variabilidad de denominación de la asignatura y de créditos ECTS entre facultades. Por ejemplo, en la Universidad de Zaragoza se imparte junto a Obstetricia y Ginecología, y tiene 10 créditos (3 de MFyC). En la Universidad de Granada, en cambio, la juntan con Patologías del Sistema Endocrino, Metabolismo y Nutrición, y a Medicina Familiar y Comunitaria apenas le corresponden 1,8 créditos. De media, el tiempo que se dedica a la Medicina Familiar y Comunitaria en las universidades españolas es de cinco semanas.

Otros ejemplos son Medicina de Familia, Comunicación, Geriatría y Cuidados Paliativos en la Universidad de La Laguna (12 créditos, 6 de MFyC); Patología General. Semiología Clínica y Medicina de Familia y Comunitaria en la Universidad de Córdoba (9 créditos, 1 de MFyC); Medicina Familiar y Comunitaria. Medicina de Urgencias en la Universidad de Cádiz (3 créditos); o Introducción a la Atención Primaria y Medicina de Familia en la Universidad Francisco de Vitoria (6 créditos).

“La presencia de la Medicina Familiar y Comunitaria es aún muy testimonial y el impacto sobre la elección de las plazas MIR de los recién egresados es un reto que se ha de afrontar

“Son nombres relacionados con la Medicina Familiar, pero sin ajustarse a la denominación de la especialidad: medicina integrada, integración, abordaje biológico, psicológico, social y cultural”, señala el informe. También se imparte en diversos cursos dependiendo de la universidad. Lo más frecuente es en quinto y sexto de carrera, si bien en algunas, como la Universidad de Córdoba, la de Sevilla o la Internacional de Cataluña, se imparte en segundo, tercero y cuarto, respectivamente.

Sobre el aspecto docente, AMFE critica que, “mientras el profesorado de médicas/médicos de familia a nivel internacional está muy presente en las universidades, en España estamos muy lejos de lo que sucede en el entorno internacional y de lo que es necesario en nuestro entorno”. “En la práctica totalidad de las facultades de Europa y en un elevado número a nivel mundial, existen departamentos de Medicina de Familia, siendo algunos de ellos nucleares en la formación de grado”, añaden.

Seis de las universidades que imparten la asignatura no disponen de prácticas de Medicina Familiar y Comunitaria

La dotación de la carga lectiva o docente, así como el número de estudiantes de cada facultad -hay cuatro con más de 300 estudiantes y cinco con 60 menos- es de igual manera muy heterogénea. Por último, el informe indica que 28 facultades disponen de prácticas tuteladas de Medicina Familiar y Comunitaria, y en 19 de ellas se reconoce como asignatura independiente con créditos propios.

“La presencia de la MFyC es aún muy testimonial y el impacto sobre la elección de las plazas MIR de los recién egresados es un reto que se ha de afrontar. Desarrollar la MFyC y su visión generalista es una estrategia que se visualiza como necesaria para poder atender las necesidades de la ciudadanía o los cambios demográficos y sociales actuales”, concluye AMFE.

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