El Servicio de Epidemiología de Castilla y León ha notificado un caso de fiebre hemorrágica de Crimea-Congo (FHCC) en la provincia de Salamanca, tras varios análisis realizados por el Centro Nacional de Microbiología del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII).
El paciente afectado, un hombre de edad avanzada, se encuentra actualmente bajo atención médica en el Hospital de Salamanca, presentando síntomas compatibles con la FHCC. La Junta ha informado que el paciente se infectó por una garrapata. Sin embargo, por ahora se mantiene estable, aunque la gravedad clínica de la enfermedad implica medidas de aislamiento y protección para el personal sanitario.
Se está llevando a cabo la identificación y seguimiento de los contactos del paciente
Las autoridades sanitarias locales, en colaboración con el personal médico del hospital, están llevando a cabo la identificación y seguimiento de los contactos del paciente. Este protocolo incluye la supervisión regular de su temperatura corporal y la comunicación de cualquier cambio en su estado de salud al epidemiólogo correspondiente.
LA FIEBRE DE CRIMEA-CONGO EN ESPAÑA
La fiebre hemorrágica de Crimea-Congo, causada por un virus, se transmite principalmente a través de la picadura de garrapatas del género 'Hyalomma'. Sin embargo, también puede transmitirse de persona a persona por contacto con sangre o fluidos corporales del paciente, especialmente entre el personal sanitario sin la protección adecuada.
Para prevenir las picaduras de garrapatas es importante usar ropa y calzado adecuados al salir al campo, así como repelentes tanto para personas como para animales de compañía. Además, retirar las garrapatas de manera adecuada y rápida también es esencial, preferiblemente por profesionales sanitarios.
Desde 2016 hasta 2023, España ha notificado 12 casos no importados de la fiebre de Crimea-Congo, según el Informe epidemiológico sobre la situación de la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo en España del ISCIII. Salamanca ha sido objetivo de esta infección seis veces desde 2020, año en el que se confirmaron tres casos, pasando por un contagio en 2021, otro en 2023 y el último que se ha notificado este 2024.
Todos los contagios coinciden en periodos primaverales y estivales, concretamente entre abril y agosto y con picos máximos en junio
El resto de casos confirmados en este periodo se dieron en Ávila, Madrid, Badajoz y León. Algunos como en León también se han dado en diversas ocasiones. En cualquier caso, todos ellos coinciden en periodos primaverales y estivales, concretamente entre abril y agosto y con picos máximos en junio.
Estos datos confirman que, los meses de calor y el contacto con la naturaleza aumenta el riesgo de infección por FHCC. Así lo recoge el informe que asegura como factor de riesgo “el contacto con animales o exposición en el campo”. Por esta razón, el ISCIII apunta a mantener medidas preventivas con el objetivo de evitar las picaduras de garrapata, extraerlas rápidamente, y detectar y comunicar los casos para establecer medidas de protección individual.