Un equipo de cirujanos de un hospital de China ha logrado trasplantar con éxito a un bebé parte del hígado invertido de su padre vivo. Según medios locales y tal y como ha recogido EFE, la niña tenía una enfermedad hepática mortal (una extraña malformación al tener las vísceras invertidas) y se salvó gracias al trasplante de parte del hígado de su padre en una operación que el centro ha calificado de pionera, ya que destacan que es la primera cirugía en el mundo con un donante vivo con inversión visceral (con el órgano a la izquierda del abdomen, en lugar de en la parte derecha).