Cada vez hay más casos de mononucleosis en menores de cinco años

Lorena Aguirre Lavín | En el Día Internacional del Beso, una experta de la SEIMC explica la importancia de un buen diagnóstico de esta infección

CS
13 abril 2014 | 00:00 h
Cada vez hay más casos de mononucleosis en menores de cinco años
Cada vez hay más casos de mononucleosis en menores de cinco años
Lorena Aguirre Lavín | Madrid

Cada vez existen más casos de mononucleosis, la también conocida como "enfermedad del beso", en menores de cinco años. En estos casos se debe al contacto salivar al compartir chupetes en guarderías y colegios, según explica Concepción Gimeno, miembro de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC) a ConSalud.es con motivo del Día Internacional del Beso, que se celebra este domingo.

"Antes, la enfermedad del beso se daba más en la adolescencia. Ahora, es frecuente en los niños, queintercambian chupetes. Ha bajado la edad de contagio", asegura. Y es que, a veces, los besos pueden tener un sabor amargo y acabar con una infección que puede generar algunos dolores de cabeza.

Se trata de la mononucleosis, una enfermedad producida por un virus, el de Epstein-Barr, principalmente, y también por otros, como el citomegalovirus o el virus del herpes tipo 6.

Este virus puede ser transmitido por un contacto salivar, como un beso. Tras ello, la persona afectada puede experimentar síntomas que van desde una faringoamigdalitis hasta fiebre elevada, explica esta experta.

Gimeno asegura que el diagnostico clínico es "muy fácil". "Se trata de una prueba muy rápida que dura entre 15 y 20 minutos", añade. No obstante, advierte de que, en ocasiones, se producen falsos positivos, especialmente en menores de 5 años.

Una vez diagnosticado, recomienda entre una semana y 15 días de reposo y descarta la administración de antibióticos. Por lo general, suele desparecer sin ocasionar más molestias. En los casos más graves, sin embargo, puede provocar ciertas alteraciones hepáticas, elevación de las transaminasas o aumento del bazo.

En general, se trata de una de las infecciones más frecuentes, especialmente en las guarderías o colegios, en los que puede haber brotes. Una vez que se padece, el organismo cuenta con anticuerpos protectores "de por vida", señala.

Por último, Gimeno recuerda la importancia de que no solo se diga a los padres que ha sido un virus sino que se mande una muestra a microbiologia "porque es la forma de tenerlo detallado". Y es que, en algunos casos, se puede asociar con linfoma en pacientes inmunosuprimidos.


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