Cerca de la mitad de los españoles (44%) entiende que, en el año 2013, la atención sanitaria en nuestro país era mejor que en otros estados de la Unión Europea (UE). Así lo pone de manifiesto el informe ‘Los sistemas sanitarios en los países de la Unión Europea’, un estudio elaborado por el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social que analiza una serie de características e indicadores en todo el continente.
En el conjunto de los 28 países que conforman la comunidad política, la percepción es 10 puntos inferior (34%), lo que pone sobre la mesa la confianza de los ciudadanos en el Sistema Nacional de Salud (SNS). Cuatro años antes, en 2009, el porcentaje de españoles que entendía que los servicios de salud que conforman nuestra sanidad eran mejores que los de los homólogos europeos se situaba en el 39%, cinco puntos menos de los que refleja el último indicador.
En el conjunto de los 28 países que conforman la Unión Europea, la percepción positiva sobre la sanidad es 10 puntos inferior que en España (34%), lo que pone sobre la mesa la confianza de los ciudadanos en el Sistema Nacional de Salud
Las cifras que refuerzan la idea de la buena calidad de la sanidad española son, precisamente, el número de ciudadanos que considera que otros sistemas de salud son mejores que el estatal y, por ende, que el SNS tiene una peor percepción. Y es que apenas un 14% de los encuestados era partidario es esta teoría en 2013, lo que evidencia la confianza en los profesionales sanitarios que desarrollan sus funciones en la Atención Primaria y la Atención Hospitalaria del país.
A nivel europeo, la media expone que un 25% de los ciudadanos declara que su sanidad es peor que en otros estados. Una afirmación que cobra especial protagonismo en estados como Rumanía, Bulgaria o Grecia, donde las tasas de individuos que toman esta idea como suya oscilan entre el 62,8% y el 78%.
En países como Rumanía, Bulgaria o Grecia son muchos los ciudadanos que declaran que su sanidad es peor que en otros estados miembros
No obstante, sí que se puede apreciar un pequeño incremento de españoles que consideran que el SNS es peor que otros sistemas si observamos los datos de 2009. Entonces el porcentaje fue del 12%, dos puntos menos que en las últimas cifras obtenidas, lo que debe poner sobre aviso tanto al Ministerio de Sanidad como a las consejerías autonómicas de Sanidad y Salud.
En el marco europeo, y tomando como referencia los años 2009 y 2013, se produce un mínimo descenso, pasando de una media del 26% de individuos que consideran que sus sistemas de salud tienen peor calidad que la de otros países a un 25%, es decir, la diferencia porcentual de los dos análisis es únicamente de un punto.