2021 ha llegado a nuestro país con cuestiones urgentes en el ámbito del Sistema Nacional de Salud (SNS). En los últimos coletazos de las fiestas navideñas, los casos de COVID-19 están elevándose de forma sustancial en todo el territorio nacional y los hospitales, con temor y resignación, ya preparan sus planes para combatir una tercera ola del SARS-CoV-2.
Los dirigentes sanitarios de las autonomías advierten que la incidencia acumulada por cada 100.000 habitantes se encuentra en un proceso de crecimiento exponencial. Unos datos en los que, además, apenas figuran los efectos de las reuniones familiares durante Nochebuena y Nochevieja, por lo que prevén que ésta siga en aumento.
Los días festivos son una de las principales preocupaciones de las consejerías de Sanidad y Salud, no solo por el aumento de casos que llevan aparejados, sino por los retrasos de notificación que llevan aparejados
Los días festivos son una de las principales preocupaciones de las consejerías de Sanidad y Salud, no solo por el aumento de casos que llevan aparejados, sino por los retrasos de notificación que llevan aparejados, por lo que la situación real todavía no se puede apreciar con nitidez.
En este contexto y a las puertas del nuevo año, el titular del Ministerio de Sanidad, Salvador Illa, anunciaba su candidatura a presidir la Generalitat de Cataluña en las elecciones del próximo 14 de febrero.
El que será la cabeza visible del PSC en sustitución de Miquel Iceta, ya ha asegurado que, cuando arranque la campaña electoral, dejará la cartera. "Hasta entonces voy a ocuparme de mis tareas como ministro", apuntaba Illa, revelando que compaginará sus funciones en Sanidad con la precampaña catalana.
La decisión de Illa no ha gustado entre sus homólogos autonómicos. A juicio de Enrique Ruiz Escudero, consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, el ministro "no debe seguir ni un minuto más" en su cargo. Sostiene que "dada la situación que estamos viviendo, el cambio de ministro de Sanidad es una decisión difícil de entender". No obstante, añade que la noticia "no ha sorprendido".
"Dada la situación que estamos viviendo, el cambio de ministro de Sanidad es una decisión difícil de entender"
En la misma línea se muestra la portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, quien acusa al titular de Sanidad de haber utilizado el Ministerio que dirige como "trampolín político" para ser el próximo candidato del PSC a las elecciones catalanas y, en este punto, le ha reprochado su "persecución política" a la Comunidad de Madrid en la gestión del coronavirus.
La líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, se ha sumado a las críticas al ministro y ha calificado de "irresponsabilidad" su marcha. Por tanto, ha exigido su dimisión: "No se puede ser ministro a tiempo completo y hacer campaña. Debe dejar de ser ministro inmediatamente".