A medida que las infecciones por Covid-19 se disparan en Estados Unidos, algunos estados están endureciendo las restricciones y restableciendo las medidas de cuarentena para frenar la propagación del virus. Un modelo desarrollado por investigadores del MIT muestra un vínculo directo entre la cantidad de personas que se infectan y la eficacia con la que un estado mantiene sus medidas de cuarentena.
Los especialistas describieron su modelo en un artículo publicado en Cell Patterns en noviembre, que muestra que el sistema podría recapitular los efectos que las medidas de cuarentena tuvieron sobre la propagación viral en países de todo el mundo. En su siguiente estudio, publicado recientemente en el servidor de preimpresión medRxiv, analizaron datos de los Estados Unidos durante la primavera y el verano pasadas. Descubrieron que ese aumento anterior de infecciones estaba fuertemente relacionado con una caída en la "fuerza de la cuarentena", una medida que el equipo define como la capacidad de evitar que las personas infectadas infecten a otras.
El último estudio se centra en la primavera pasada y principios del verano, cuando el sur y el centro-oeste de los Estados Unidos vieron un aumento vertiginoso de las infecciones a medida que los estados de esas regiones reabrieron y relajaron las medidas de cuarentena
El último estudio se centra en la primavera pasada y principios del verano, cuando el sur y el centro-oeste de los Estados Unidos vieron un aumento vertiginoso de las infecciones a medida que los estados de esas regiones reabrieron y relajaron las medidas de cuarentena. Los investigadores usaron su modelo para calcular la fuerza de la cuarentena en estos estados, muchos de los cuales reabrieron temprano después de los cierres iniciales en la primavera.
Si estos estados no hubieran reabierto tan temprano, o hubieran reabierto pero aplicado estrictamente medidas como el uso de mascarillas y el distanciamiento social, el modelo calcula que más del 40% de las infecciones podrían haberse evitado en todos los estados que consideraron los investigadores. En particular, el estudio estima que si Texas y Florida hubieran mantenido medidas de cuarentena más estrictas, se podrían haber evitado más de 100.000 infecciones en cada uno de esos estados.
"Si observa estos números, las acciones simples a nivel individual pueden conducir a grandes reducciones en el número de infecciones y pueden influir enormemente en las estadísticas globales de esta pandemia", dice el autor principal Raj Dandekar, estudiante graduado del Departamento de Asuntos Civiles del MIT e Ingeniería Ambiental.
Mientras el país lucha contra una ola invernal de nuevas infecciones y los estados vuelven a endurecer las restricciones, el equipo espera que el modelo pueda ayudar a los responsables de la formulación de políticas a determinar el nivel de medidas de cuarentena que deben implementarse.
"Lo que creo que hemos aprendido cuantitativamente es que saltar de la hipercuarentena a la ausencia de cuarentena y volver a la hipercuarentena definitivamente no funciona"
"Lo que creo que hemos aprendido cuantitativamente es que saltar de la hipercuarentena a la ausencia de cuarentena y volver a la hipercuarentena definitivamente no funciona", apunta el coautor Christopher Rackauckas, instructor de matemáticas aplicadas en el MIT. "En cambio, una buena aplicación consistente de la política habría sido una herramienta mucho más efectiva".
Los coautores del MIT del nuevo artículo también incluyen a la estudiante de pregrado Emma Wang y al profesor de ingeniería mecánica George Barbastathis.