La compañía polaca GeneMe ha desarrollado el sistema Frankd, una prueba rápida, fiable y reproducible para comprobar si un paciente padece la COVID-19, que se efectúa mediante hisopos bucales y que se completa en una media de tiempo de 13-25 minutos, sin necesidad de que un laboratorio participe en el proceso.
Esta nueva herramienta precisa de menos tiempo para reflejar resultados que la reacción en cadena de la polimerasa de transcriptasa inversa, la conocida como PCR y que se posiciona como la prueba más recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Esta nueva herramienta precisa de menos tiempo para reflejar resultados que la reacción en cadena de la polimerasa de transcriptasa inversa, la conocida como PCR y que se posiciona como la prueba más recomendada por la OMS
Asimismo, los análisis en el lugar por parte de los profesionales sanitarios tienen, como primera consecuencia, la eliminación de los retrasos y la supresión de que las muestras tengan que ser procesadas por técnicos de laboratorio, quienes han visto como su carga de trabajo ha sobrepasado todos los límites esperables durante los días más funestos de la pandemia de SARS-CoV-2.
Atendiendo a detalles concretos, los usuarios se sirven de una aplicación segura y gratuita de identificación digital como es Yoti, con el propósito de vincularse a su prueba. Con su consentimiento informado, el resultado de las pesquisas se agrega automáticamente a la app. Acto seguido, son estas personas las que pueden compartir sus detalles verificados con un profesional autorizado con solo tocar un botón o escanear un código QR.
La prueba ha sido validada, de forma independiente, con un 100% de sensibilidad y especificidad por la Universidad Tecnológica de Gdańsk y sus creadores confían en que obtenga la certificación europea CE a principios del mes de junio
La prueba ha sido validada, de forma independiente, con un 100% de sensibilidad y especificidad por la Universidad Tecnológica de Gdańsk y sus creadores confían en que obtenga la certificación europea CE a principios del mes de junio. La empresa se encuentra, en la actualidad, en conversaciones con gobiernos y compañías de toda Europa para que inviertan en las citadas pruebas, lo que permitiría evaluar diariamente a cientos de ciudadanos.
El fundador y director ejecutivo de GeneMe, Dawid Nidzworski, ha señalado que su equipo “está extremadamente satisfecho con la calidad de la prueba Frankd y la contribución que hará en la lucha contra la pandemia de coronavirus, que está mostrando sus efectos perjudiciales en la salud pública y la sociedad”.