De esta manera, en el encuentro científico se han dado a conocer los resultados de un ensayo con más de 600 pacientes que ha confirmado que la quimioterapia y la radioterapia combinadas (quimiorradiación) debe mantenerse como tratamiento estándar para pacientes con cáncer de cérvix localmente avanzado. Los autores han descartado que la quimioterapia administrada antes de cirugía mejore el pronóstico en mujeres con esta enfermedad.
Añadir abemaciclib a la terapia hormonal estándar de un tipo de cáncer de mama logró reducir el riesgo de recaídas un 46%
En el estudio se incluyeron a 633 pacientes y, tras un seguimiento de cinco años, se observó un índice de supervivencia sin recaídas del 69,3% en quienes recibieron quimioterapia y cirugía, mientras que el porcentaje era del 76,7% en el grupo de quimiorradiación. Respecto al tratamiento del cáncer de mama, el estudio Monarch-3 ha demostrado la utilidad de añadir un nuevo medicamento, abemaciclib, al tratamiento hormonal que habitualmente se emplea como estándar en un tipo concreto de cáncer de mama: en mujeres postmenopáusicas con enfermedad avanzada, receptores hormonales positivos en la superficie de las células y que no expresan la proteína HER2 (HER2-).
Este estudio se ha llevado a cabo con 493 pacientes postmenopáusicas de 22 países y los resultados dados demuestran que tras 18 meses de seguimiento, añadir abemaciclib a la terapia hormonal estándar (con un inhibidor de la aromatasa) logró reducir el riesgo de recaídas un 46%.
Asimismo, en esta cita también se han dado a conocer de primera mano las nuevas opciones terapéuticas que van a permitir mejorar la supervivencia en cáncer de pulmón y evitar a los pacientes procedimientos innecesarios. De acuerdo con uno de estos trabajos, el estudio Pacific, afirma que administrar el fármaco durvalumab como manteniento después del tratamiento con quimioterapia y radioterapia permite mejorar la supervivencia libre de progresión en pacientes con cáncer de pulmón no microcítico localmente avanzado e inoperable.
Otro tema importante que se ha analizado ha sido la atención sanitaria dirigida a los adolescentes y adultos jóvenes que han superado un cáncer. En este encuentro científico se ha podido comprobar que ésta es mejorable. Además, de cara al futuro, los investigadores presentes en este encuentro han advertido que las secuelas de la enfermedad a largo plazo pueden tener consecuencias en la vida laboral de los supervivientes.