Las células ocultas del VIH, también conocidas como silenciosas, favorecen la resistencia del virus en el cuerpo y no pueden someterse a los tratamientos actuales. Estas células son el motivo por el que, las personas que sufren VIH, necesitan un tratamiento de por vida para suprimir el virus.
Hasta la fecha, el único tratamiento para las personas infectadas de VIH que viven con el virus de por vida, es la terapia antirretroviral (TAR). Este método no ataca a las células infectadas de VIH, lo que significa que solo suprime el virus, pero no puede curarlo.
Ahora, un grupo de investigadores del Instituto Walter y Eliza Hall (Australia) ha descubierto que, un fármaco que lucha contra el cáncer en la sangre, podría ser eficaz para matar las células del VIH "silenciosas" y retrasar las reinfecciones. Este descubrimiento podría ser prometedor para acabar con la enfermedad en un futuro.
Se estima que el 98% de los australianos que viven con VIH actualmente tienen niveles indetectables del virus, ya que el tratamiento ART en curso lo suprime por completo.
En el nuevo estudio, los investigadores utilizaron el medicamento contra el cáncer venetoclax en modelos preclínicos mejorados de VIH y descubrieron que retrasó la recuperación del virus en dos semanas, incluso sin TAR.
El coprimer autor del estudio, el doctor Philip Arandjelovic, ha asegurado que el descubrimiento es un paso emocionante hacia el desarrollo de opciones de tratamiento para las decenas de millones de personas que actualmente viven con VIH en todo el mundo.
"Cada logro en retrasar el regreso de este virus nos acerca a prevenir que la enfermedad resurja en las personas que viven con el VIH"
"Al atacar las células inactivas del VIH y retrasar el rebote viral, el venetoclax se ha mostrado prometedor más allá de los tratamientos actualmente aprobados", ha afirmado el investigador. "Cada logro en retrasar el regreso de este virus nos acerca a prevenir que la enfermedad resurja en las personas que viven con el VIH. Es de esperar que nuestros hallazgos sean un paso hacia este objetivo", ha añadido.
El estudio marca la primera vez que venetoclax se utiliza solo para evaluar la persistencia del VIH en modelos preclínicos. Sin embargo, los investigadores también descubrieron que el tratamiento contra el cáncer se puede combinar con otro fármaco que actúa en la misma vía y que actualmente se encuentra en ensayos clínicos, para lograr un retraso más prolongado en el rebote viral, con una duración más corta del tratamiento con venetoclax.
"Hace tiempo que se entiende que un fármaco puede no ser suficiente para eliminar completamente el VIH. Este hallazgo respalda esa teoría y al mismo tiempo descubre el poderoso potencial del venetoclax como arma contra el VIH", ha afirmado el doctor Arandjelovic.
El VIH se dirige principalmente a las células T CD4+, un tipo de glóbulo blanco crucial para el funcionamiento adecuado del sistema inmunológico. Es dentro de estas células donde el VIH puede permanecer latente, listo para reactivarse si el virus no se elimina eficazmente.
Los científicos del Instituto Doherty descubrieron que venetoclax también podía reducir la cantidad de ADN del VIH en estos glóbulos blancos
Utilizando células T CD4+ humanas donadas por personas que viven con el VIH y reciben tratamiento antirretroviral supresor, los científicos del Instituto Doherty descubrieron que venetoclax también podía reducir la cantidad de ADN del VIH en estos glóbulos blancos.
El coprimer autor, el doctor Youry Kim de la Universidad de Melbourne e investigador postdoctoral en el Instituto Doherty, ha explicado que venetoclax redujo potentemente la cantidad de ADN viral intacto en las células de los pacientes cuando se estudió en el laboratorio.
"Esto indica que venetoclax está matando selectivamente las células infectadas, que dependen de proteínas clave para sobrevivir. Venetoclax tiene la capacidad de antagonizar una de las proteínas clave para la supervivencia", ha declarado el doctor Kim.
Venetoclax, comercializado como 'Venclexta', se basa en un descubrimiento histórico realizado por el profesor David Vaux AO en 1988. El fármaco es el resultado de una colaboración de investigación entre WEHI y las empresas Roche, Genentech (miembro del Grupo Roche) y AbbVie. Fue desarrollado por Roche, Genentech y AbbVie y codesarrollado y probado en Australia.
El ensayo clínico de fase I/IIb que utiliza venetoclax para tratar el VIH comenzará a finales de año en Dinamarca, con planes de expandir el estudio a Melbourne (Australia) en 2024.
"El ensayo evaluará la seguridad y tolerabilidad del venetoclax en personas que viven con el VIH y que reciben terapia antirretroviral supresora", ha declarado el exjefe de la División de Enfermedades Infecciosas y Defensa Inmunológica de WEHI, el profesor Marc Pellegrini.
La profesora Sharon Lewin, coautora del premio Melbourne Laureate, ha concluido que "es emocionante ver que venetoclax, que ya ha ayudado a miles de pacientes con cáncer de la sangre, ahora se reutiliza como un tratamiento que también podría ayudar a cambiar las vidas de las personas que viven con el VIH y poner fin a la enfermedad".