¿Son compatibles las vacaciones de verano con el tratamiento de la apnea del sueño?

Ante la llegada del verano son ya muchos los que están preparando sus vacaciones,en las que realizarán viajes durmiendo por tanto en lugares diferentes del habitual. En estos casos, algunas de las personas que padecen apnea del sueño deciden suspender su tratamiento con CPAP sin plantearse ni siquiera que pueden contar con el dispositivo en sus desplazamientos. Los especialistas aconsejan esta opción y recuerdan que el uso de la CPAP es perfectamente compatible con este tipo de viajes.

La presión positiva en la vía aérea (CPAP) es el tratamiento estándar de la apnea del sueño. Se trata de una mascarilla que el paciente deberá utilizar mientras duerme y que, conectada a un generador de flujo, proporciona un suministro de aire continuo y mantiene abiertas las vías respiratorias. En muchas ocasiones es complementaria con humificadores que ayudan a evitar los posibles efectos secundarios, como la sequedad nasal o la garganta irritada. Con este tratamiento el paciente no sólo reduce los ronquidos o el cansancio, sino que también disminuye el riesgo de sufrir complicaciones como enfermedades cardiovasculares.

A la hora de viajar, los especialistas aconsejan disponer de filtros bacterianos, tubos flexibles y clips para el arnés de repuesto, así como cualquier otra pieza importante que se deba sustituir en caso de ruptura o pérdida de la CPAP. “Obviamente, la mejor solución es llevarse una máscara de repuesto, aunque sea antigua, en lugar de no tener ninguna o pasar una noche sin tratamiento”, recomiendan en webs como la de Air Liquide Healthcare, donde se puede encontrar amplia información con consejos al respecto.

Algunos consejos prácticos para los próximos viajes de cara a las vacaciones se pueden resumir en los siguientes: Voltaje en el extranjero, la CPAP puede usarse en cualquier país; la mayoría de las máquinas se convertirán automáticamente al voltaje adecuado. En un avión hay muchas probabilidades de que las aerolíneas dejen usar la CPAP en el avión si se organiza todo previamente con la compañía aérea. La alta altitud puede hacer que la CPAP sea menos efectiva, pero seguirá mereciendo la pena usarla.

Otros consejos recuerdan que el equipo de CPAP tiene una autonomía de hasta aproximadamente 8 horas. (si se usa con batería externa). En cuanto al oxígeno, es peligroso usar oxígeno cuando el equipo de CPAP funciona desconectado de la corriente. No todos los humidificadores pueden funcionar de forma independiente, por lo que es importante que el usuario compruebe el suyo. Por último, se recuerda que es fácil dañar el equipo de CPAP durante el transporte.

Así mismo, los especialistas recomiendan llevar de viaje la tarjeta de alerta de CPAP, con la que se advierte que el usuario padece apnea del sueño. Ante el peligro de colapso de las vías respiratorias mientras el paciente duerme o está inconsciente, la tarjeta ofrece una información relevante que los médicos deben conocer. Además, informa sobre las presiones de CPAP, un contacto de emergencia y los datos de la clínica.

Viajar con la CPAP no te tiene que preocupar ya que tiene un tamaño bastante pequeño, es portátil y se transporta con facilidad. Si el usuario sigue estos consejos, podrá mantener su independencia aunque viva con apnea del sueño y siga un tratamiento.


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