Las familias que tienen algún hijo con discapacidad afrontan en su día a día gastos de todo tipo a consecuencia de cuidar la salud de sus pequeños. Llevarlos al fisioterapeuta o al logopeda, así como el hecho de que tengan que comprar artículos de ortopedia o adaptar sus casas, supone un gasto extra al que no todas las familias pueden hacer frente. Las ayudas por parte de la Seguridad Social son escasas y en algunos casos inexistentes. Este hecho ha llevado a la Plataforma de Familias con Hijos con Discapacidad a trabajar en el último año en una encuesta realizada en Madrid para conocer los copagos no farmacológicos a los que deben enfrentarse en su día a día.
En dicho informe, cuyos resultados se harán públicos el próximo jueves, se indica que el gasto mensual en terapias y el farmacológico de carácter medio al mes es de más de 800 euros. Además, el gasto medio registrado en artículos de necesidad es de más de 11.000 euros. Todo ello teniendo en cuenta que los ingresos medios mensuales familiares de las personas analizadas en este estudio eran de 2.344 euros.
Este tipo de familias reivindican ayudas sociosanitarias que les permitan acceder a terapias que mejoren la salud y la calidad de vida de sus hijos con alguna discapacidad
Ante este panorama las familias con algún hijo afectado por una enfermedad que le crea discapacidad reivindican ayudas sociosanitarias para mejorar la calidad de vida de los pequeños. Desde la Plataforma de Familias con Hijos con Discapacidad consideran que era necesario hacer una encuesta que refleje claramente cuál es la situación real actual desde el punto de vista económico, qué recursos y terapias son las que la sanidad pública ofrece y qué gastos están afrontando las familias por privado.
CONSECUENCIAS LABORALES
Algunas de las consecuencias laborales en unidades familiares de este tipo revelan que sólo el 57% de los cuidadores principales tienen trabajo remunerado; el 40% del total de progenitores han solicitado reducción de jornada y el 54,4% han tenido que renunciar a un empleo remunerado. Asimismo, según este informe, más del 10% han sido despedidos por tener que cuidar a sus hijos. En cuanto a las consecuencias psicológicas, la percepción y las expectativas son negativas para el 77% de los encuestados.
TERAPIAS NECESARIAS
Este tipo de familias tienen que hacer frente también, además de a los recursos farmacológicos, a determinadas terapias necesarias para el buen cuidado de sus hijos. La logopedia es la que más familias precisan, hasta el 68,1% y la mitad de ellas recurren también a la fisioterapia, la psicología o la psiquiatría. Los valores en los niños con parálisis o daño cerebral de fisioterapia aumentan hasta el 81,3%. Los pequeños reciben otras terapias como fisioterapia en piscina y equinoterapia en un 40% de los casos, no cubierto nunca por el Sistema Nacional de Salud (SNS).