La corrupción ha salpicado a la política española en los últimos años en numerosas ocasiones, llegando a tener incluso importantes consecuencias sobre las instituciones. Una de ellas ha sido la moción de censura que ha llevado a Pedro Sánchez a la Moncloa en detrimento de Mariano Rajoy, acción que se presentó tras conocerse la sentencia del caso Gürtel que condenaba a exaltos cargos del PP y se implicaba al partido.
En este caso, el sector sanitario no ha podido quedarse al margen. Y es que, uno de estos políticos que han sido condenados por la trama Gürtel ha sido Ana Mato, quien fuera ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad entre 2011 y 2014. De hecho, el motivo de su dimisión fue su imputación como partícipe a título lucrativo en los delitos cometidos por su exmarido y exalcalde de Pozuelo, Jesús Sepúlveda.
A pesar de la condena de la Audiencia Nacional, la exministra Ana Mato ha defendido su inocencia asegurando que su nombre no aparece en papeles "que digan que he cobrado sobresueldos"
Años después, la Audiencia Nacional ha dictado la sentencia del caso, condenando a Mato a pagar 27.857 euros por beneficiarse de los regalos de su exmarido, que también ha sido condenado, en este caso a 14 años de cárcel. A pesar de ello, la exministra ha defendido su inocencia. Recientemente, compareció en la Comisión de Investigación del Congreso de los Diputados asegurando que no había aparecido “jamás en papeles que digan que he cobrado sobresueldos”.
EXALTOS CARGOS DEL PSOE
Pero no solo ha sido el Partido Popular quien tiene entre sus filas a cargos supuestamente relacionados con actos corruptos. Hace pocas semanas, la justicia ha citado a cargos sanitarios para declarar sobre la presunta financiación irregular del PSOE valenciano. En concreto, ha llamado a Consuelo Sánchez Naranjo, ex subsecretaria de Sanidad y Consumo, y Etelvina Andreu, ex directora general de Consumo. Ambas estuvieron en el Ministerio de Sanidad durante la época de José Luis Rodríguez Zapatero.
En concreto, el juzgado quiere investigar si se ha producido un delito de prevaricación y malversación en el entorno de Bernat Soria, exministro de Sanidad. Se analiza así un concurso de publicidad del Ministerio de la campaña 2008, por importe de 184.138 euros.