El Partido Laborista de Gran Bretaña se ha comprometido a gastar unos 30.000 millones de euros adicionales en atención médica si gana las elecciones del 12 de diciembre, incluido la contratación de miles de empleados más, la reconstrucción de instalaciones y el suministro de nuevos equipos.
Tratando de reenfocar la campaña lejos del Brexit y en su terreno tradicional fuerte de atención médica, desde el partido aseguran que el Servicio Nacional de Salud (NHS) estatal había enfrentado una "década de decadencia" bajo los conservadores gobernantes.
El NHS es calificado por los votantes como el segundo problema más importante después del Brexit
"Su récord es uno de desmantelar el NHS e imponer en esta última década la mayor restricción de fondos en la historia del NHS", ha dicho el portavoz de finanzas laborales John McDonnell en un discurso en la Royal Society of Medicine en el centro de Londres del que se hace eco Reuters.
McDonnell ha explicado que el aumento en términos reales de 26 mil millones de libras para el gasto diario de 2018-19 a 2023-24 en comparación con los 20 mil millones de libras prometidos por los conservadores del primer ministro Boris Johnson para el mismo período.
Los conservadores, que están a la cabeza de las encuestas, ha dicho que un plan de laborista para reducir la semana laboral a 32 horas aumentaría los costos para el NHS. La mano de obra negó esto, diciendo que se llevaría a cabo durante 10 años a medida que la economía creciera y hubiera mayores ingresos fiscales disponibles para financiarla.
El NHS, que ha brindado atención médica gratuita en el punto de uso durante más de 70 años, es constantemente calificado por los votantes como el segundo problema más importante después del Brexit.
Luchando bajo la presión de una demanda récord debido a una población en crecimiento y envejecimiento, así como a los recortes en los servicios de atención social, el servicio de salud advirtió que enfrenta un déficit de financiación a pesar de las promesas del gobierno de dinero extra.