Un estudio analiza la mortalidad en pacientes con cáncer vacunados infectados por Covid-19

El estudio publicado en Annals of Oncology investigó los casos de pacientes que con cáncer completamente vacunados infectados por Covid-19.

Este estudio analiza a los pacientes con cáncer vacunados que han sufrido covid-19  (Foto. Freepik)
Este estudio analiza a los pacientes con cáncer vacunados que han sufrido covid-19 (Foto. Freepik)
Ander Azpiroz
27 diciembre 2021 | 11:20 h
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El estudio, publicado el 24 de diciembre en Annals of Oncology, es el primero en evaluar las características clínicas y los resultados de los pacientes que sufren de cáncer y que tenían infecciones por Covid-19, a pesar de estar vacunados. Los resultados mostraron que los pacientes completamente vacunados que experimentaron infecciones progresivas tenían una tasa de hospitalización del 65%, una tasa de ventilación mecánica o en la UCI del 19% y una tasa de muerte del 13%. El estudio fue realizado por Covid-19 y Cancer Consortium (CCC19), que se trata de 129 centros de investigación que han estado observando el impacto de la Covid-19 en pacientes con cáncer desde el comienzo de la pandemia.

"Los pacientes con cáncer que desarrollan Covid-19 incluso después de la vacunación completa aún pueden experimentar resultados graves, incluida la muerte, es por eso que un enfoque de múltiples niveles que incluyan la mascarilla y el distanciamiento social, junto con la vacunación más un refuerzo contra COVID-19 sigue siendo un enfoque esencial para el futuro previsible", comentaba Toni Choueiri, MD, director del Centro Lank de Atención Genitourinaria en el Instituto de Cáncer Dana-Farber y autor principal de la reporte.

"Muchos datos emergentes han sugerido que los pacientes con cáncer, especialmente los cánceres de la sangre, no generan respuestas de anticuerpos protectores adecuadas"

Los datos de la investigación, se recogieron entre el 1 de noviembre de 2020 y el 31 de mayo de 2021. Fueron considerados pacientes totalmente vacunados los que habían recibido dos dosis de la vacuna BioNTech, Pfizer o Moderna, vacuna NIAD, o una dosis de la vacuna J&J.

Jeremy Warner, MD, director de el Centro Coordinador de Investigaciones CCC19, profesor asociado del Centro Oncológico Vanderbilt-Ingram y autor principal del estudio explicaba: “Debido a que las medidas de inmunidad no se recopilan de manera rutinaria en la atención clínica, no sabemos si estos fueron pacientes que desarrollaron respuestas inmunes efectivas después de la vacunación. Muchos datos emergentes han sugerido que los pacientes con cáncer, especialmente los cánceres de la sangre, no generan respuestas de anticuerpos protectores adecuadas. Es importante señalar que muchos de los mismos factores que identificamos antes de la disponibilidad de la vacuna (edad, comorbilidades, estado funcional y cáncer en progresión), todavía parecen impulsar muchos de los malos resultados ”.

El número de pacientes con cáncer y Covid-19 fue de 1.787, la gran mayoría de estos no se encontraban vacunados, 54 sí , y el 46% de los completamente vacunados tenían niveles reducidos de linfocitos, las células T y las células B responsables de las respuestas inmunológicas a los virus. La linfopenia es frecuente en pacientes con cáncer que reciben anticuerpos monoclonales anti-CD20 o tratamientos con células CAR-T para neoplasias malignas hematológicas, incluyendo linfoma y leucemia. El estudio muestra que las observaciones de que los pacientes con neoplasias hematológicas tienen un mayor riesgo de sufrir resultados graves por COVID-19. Sin embargo, la cantidad de personas observadas en esta investigación, no son suficientes para sacar conclusiones definitivas.

“Se han reportado resultados similares (altas tasas de mortalidad entre individuos completamente vacunados) en otras poblaciones de pacientes inmunodeprimidos, como los receptores de trasplantes de órganos, antes de la utilización de dosis adicionales de vacuna. Estos hallazgos se producen en un momento de preocupación de que los mutantes de escape inmunológico, como la cepa ómicron, puedan surgir de pacientes infectados crónicamente con sistemas inmunitarios debilitados. Por lo tanto, los inmunosuprimidos y sus contactos cercanos deben ser grupos objetivo para intervenciones terapéuticas y preventivas, incluida la divulgación a nivel comunitario y los esfuerzos educativos ”, concluía Dimitrios Farmakiotis, MD, clínico de enfermedades infecciosas en la Escuela deMedicina Warren Alpert de la Universidad de Brown y un estudiante de último año, autor del estudio.

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