Los profesionales coinciden a la hora de defender que, en todo caso, la maternidad subrogada no puede conllevar acuerdos económicos entre las partes
De esta forma, María Castellano, miembro de la Comisión Central de Deontología de la OMC, señala en una entrevista al portal MedicosyPacientes de la organización, que “no puede ser lícito un procedimiento en el que participa una mujer, poniendo al servicio de otros, a cambio de dinero, su capacidad biológica para llevar durante nueve meses en su seno, a un nuevo ser”.Castellanos incide en la preservación de la dignidad de la mujer en su argumento, puesto que considera que “la Medicina ha tenido muy presente que la dignidad humana exige que el acto de la donación de órganos o tejidos, sea un acto altruista y generoso; mucha más importancia cobra este principio cuando la donación consiste en convivir nueve meses con un nuevo ser que depende de ti en su vida biológico-psicológica de cada minuto, con las implicaciones afectivas y emocionales que esto implica”.
“La excepcionalidad del altruismo pleno y en circunstancias muy determinadas, podría considerarse”
La profesional, que participará en una mesa de debate sobre esta técnica en el Congreso Nacional de Deontología Médica que se celebra estos días en Málaga, añade no obstante que “la excepcionalidad del altruismo pleno y en circunstancias muy determinadas, podría considerarse” en referente a esta técnica, que está prohibida en España por la Ley de Reproducción Humana Asistida, de 2006.UN MEDIO MANIPULABLE
Por otro lado, Joaquín Fernández-Crehuet, presidente de la Comisión de Deontología del Colegio Médico de Málaga, y del comité organizador del encuentro nacional que se celebra en la ciudad andaluza, se postula, en declaraciones al mismo portal de la OMC, “claramente en contra deesta práctica ya que la mujer “alquilada” para la maternidad por sustitución, se transforma siempre en un medio manipulable para dejar de ser considerada como una realidad digna por sí misma”.
Fernández-Crehuet también hace referencia al aspecto de la dignidad humana, y señala que “hoy más que nunca, la humanidad está en una encrucijada entre dos grandes posibilidades: una es la de poner la ciencia al servicio de las personascon respeto a su dignidad, y otra es utilizarla sin ninguna limitación ética, solo buscando la utilidad de los resultados”.
CÓDIGO DEONTOLÓGICO
En lo que respecta al Código Deontológico de la OMC, su artículo 56, señala que las técnicas de reproducción asistida “sólo estarán indicadas como métodos para resolver la infertilidad de la pareja una vez agotados los procedimientos naturales”, así como que “el médico no debería promover la procreación artificial en mujeres que hayan alcanzado la menopausia natural y en todo caso después de los 55 años”.
Afirmaciones como estas hacen que, ante una hipotética regulación legal del asunto, el médico, en líneas generales, pueda “plantear muchas objeciones de tipo ético en caso de participación en el proyecto de maternidades subrogadas”, según concluye un estudio publicado en la Revista Española de Medicina Legal.
Como recoge un informe del Observatorio de Bioética de la universidad Católica de Valencia, la maternidad subrogada altruista (en la que la mujer que gesta el embrión no recibe ninguna remuneración) está permitida, bajo diversas condiciones, en países como Holanda, Reino Unido o Portugal, mientras que en zonas como California (Estados Unidos), donde también se permite la gestación comercial,el precio de proceso de maternidad subrogada oscila entre 70.000 y 120.000 dólares.
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