Según el doctor Julián Taylor, uno de los responsables del proyecto, en el análisis de los datos obtenidos tras la finalización de la fase de estudio de pacientes con dolor crónico y de voluntarios sanos sin dolor, han observado hallazgos en espectroscopia cerebral (resonancia magnética) novedosos hasta la fecha. “Estos cambios observados a nivel cerebral están correlacionados positivamente con la sintomatología que el paciente refiere en sus actividades de la vida diaria, por lo que podríamos estar cerca de obtener una herramienta objetiva para diagnosticar a estos pacientes”, ha señalado Taylor.
Para poder confirmar estos hallazgos, asegura el doctor, es importante hacer una comparación de lo observado en pacientes que tienen dolor con pacientes que sufrieron el mismo latigazo cervical pero que se recuperaron. Esto ayudaría a comprender porque unos pacientes son capaces de recuperarse mientras que otros permanecen con los mismos síntomas años después.
15% DE LOS ACCIDENTES DE TRÁFICO
En España se estima que aproximadamente el 15% de los afectados por accidentes de tráfico sufren un esguince cervical o síndrome de latigazo cervical. Aunque en la mayoría de los casos el dolor del cuello y la sintomatología acompañante (vértigo, visión borrosa, hormigueos en las extremidades…) ceden en pocos días o semanas, hay un porcentaje de pacientes en los que estos síntomas continúan y el dolor se hace crónico a pesar de la normalidad en las pruebas diagnósticas realizadascomo resonancias magnéticas o radiografías. Una de las causas de que no desaparezca el dolor en este grupo de pacientes podría ser la existencia de una sensibilización central, como ya se ha demostrado en otros grupos de pacientes como lesionados medulares con dolor neuropático y pacientes con fibromialgia.
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