Ideal tanto para pieles apagadas como deshidratadas, el tratamiento Skinbooster, tal y como señala la doctora María Ángeles López Martín, directora del Centro Médico Rusiñol, "es un redensificador de la piel que con un enfoque progresivo y personalizado mejora de la calidad de la piel a través de un procedimiento médico estéticoque cuenta con rápidos y excelentes resultados". Pero, ¿en qué consiste este tratamiento?
Skinbooster en un tratamiento médico-estético que consiste en la aplicación a través de microinyecciones de un gel muy suave de ácido hialurónico (AH) estabilizado mediante la tecnología única y patentada NASHA. "El protocolo habitual de Skinbboster consta de una fase de inicio de 3 tratamientos espaciados de 2 a 4 semanas y un tratamiento de mantenimiento posterior a los 6 meses", ha recalcado la especialista.
El protocolo de Skinbooster puede aplicarse sin límites de edad, aunque es desde los 30 años cuando comienzan a aparecer los primeros signos de envejecimiento
De hecho, este es un procedimiento que debe ser aplicado por un médico especialista en tratamientos estéticos y lo más importante es que va a tratar la "piel rota sin aportar volumen". El protocolo de Skinbooster puede aplicarse sin límites de edad, aunque "es desde los 30 años cuando comienzan a aparecer los primeros signos de envejecimiento y cambios en el rostro".
Si se desea renovar el rostro disipando los signos del envejecimiento sin acudir a otros tratamientos más invasivos y con cirugía, Skinbooster es una opción perfecta. A través de la aplicación de este tipo de ácido hialurónico se logra una inhibición de la degradación del propio ácido hialurónico debido a la metaloproteasa, un enzima que forma parte de su composición y que va a contribuir a aumentar la hidratación y firmeza de la piel.
MENOS FLACIDEZ E HIDRATACIÓN VISIBLE
Skinbooster ayuda a combatir la flacidez al evitar la degradación de colágeno y elastinapor su componente metaloproteasa. A través de un tratamiento con diversas sesiones se logra un efecto tensor, donde la piel se verá más firme, tersa y sobre todo hidratada.
Se hidrata de manera notable el rostro, aportando luminosidad, elasticidad y mejorando visiblemente la apariencia de la piel. Por ser un procedimiento no invasivo, la recuperación es bastante rápida (1 o 2 horas) y es un tratamiento que se realiza en sesiones de 30 a 45 minutos dependiendo de la zona a tratar y de los resultados que se desean obtener. Además, Skinbooster permite a los pacientes retomar su rutina diaria sin contratiempos ni lapsos de reposo prolongados.
NÚMERO DE SESIONES
Este tratamiento facial ofrece resultados rápidos que en un par de días se comienzan a notar y dependiendo del objetivo final se calcula la cantidad de sesiones. Tal y como ha apuntado la doctora, "lo ideal es llevar a cabo entre dos y cuatro sesiones de este tratamiento y para mantenimiento se estima uno cada seis meses".
Skinbooster ha ganado bastante popularidad. De hecho, los pacientes de este tratamiento se muestran muy satisfechos con el tratamiento: a un 96% le gustaría repetir y/o continuar con el tratamiento.
Para finalizar, la doctora ha concluido que "es importante entender que para alargar los resultados obtenidos con Skinbooster se empleen hábitos alimentarios equilibrados, se evite la exposición al sol de las zonas tratadas sin la debida protección y sobre todo evitar el consumo de tabaco y alcohol".