¿Cómo aliviar la tendinitis de Aquiles?

La mayoría de los casos de tendinitis aquílea puede tratarse con cuidados relativamente simples en el hogar bajo supervisión del médico

Tendinitis de Aquiles
Tendinitis de Aquiles
Lorena García - Redactora
10 diciembre 2021 | 15:00 h
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La tendinitis aquílea es una lesión por sobrecarga del tendón de Aquiles, la banda de tejido que conecta los músculos de las pantorrillas en la parte trasera de la parte inferior de la pierna con el hueso del talón.

La tendinitis aquílea ocurre, con mayor frecuencia, en corredores que aumentan la intensidad o la duración de sus carreras de manera repentina. También es frecuente entre las personas de mediana edad que practican deportes, como tenis o básquetbol, solo los fines de semana.

La tendinitis aquílea ocurre, con mayor frecuencia, en corredores que aumentan la intensidad o la duración de sus carreras de manera repentina

La mayoría de los casos de tendinitis aquílea puede tratarse con cuidados relativamente simples en el hogar bajo supervisión del médico. Las estrategias de cuidado personal, por lo general, son necesarias para prevenir episodios recurrentes. Los casos más graves de tendinitis aquílea pueden provocar desgarros en el tendón (roturas) que pueden requerir reparación quirúrgica.

Si bien puede no ser posible prevenir la tendinitis de Aquiles, puedes tomar ciertas precauciones para reducir el riesgo de padecerla:

  • Aumenta tu nivel de actividad de manera gradual. Si recién estás comenzando con una rutina de ejercicios, empieza lentamente e incrementa progresivamente la duración e intensidad del entrenamiento.
  • Tómalo con calma. Evita las actividades que provoquen un esfuerzo excesivo para tus tendones, como carreras de montaña. Si participas en una actividad exigente, primero haz ejercicios de calentamiento a un ritmo más lento. Si notas dolor durante un ejercicio en particular, suspende y descansa.
  • Escoge tu calzado cuidadosamente. El calzado que tengas puesto mientras te ejercitas debe proporcionar una amortiguación adecuada para el talón y debe tener un soporte firme para el arco, a fin de ayudar a reducir la tensión en el tendón de Aquiles. Reemplaza el calzado desgastado. Si tu calzado se encuentra en buen estado pero no tiene un buen soporte para los pies, intenta usar soportes para el arco en ambos lados.
  • Haz estiramientos todos los días. Tómate el tiempo para estirar los músculos de las pantorrillas y el talón de Aquiles en las mañanas, antes de ejercitarte y después de ejercitarte para mantener la flexibilidad. Esto resulta especialmente importante para evitar la recurrencia de la tendinitis de Aquiles.
  • Fortalece los músculos de las pantorrillas. Los músculos fuertes de las pantorrillas permiten que las pantorrillas y el tendón de Aquiles soporten mejor el esfuerzo que se realiza durante la actividad y el ejercicio.
  • Hacer entrenamientos cruzados. Alterna actividades de alto impacto, como correr y saltar, con actividades de bajo impacto, como andar en bicicleta y nadar.
Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
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