El níscalo es una de las setas más populares. Es común en las zonas húmedas, en los bosques de pinos, durante el final del verano y el otoño.
Según la Fundación Española de la Nutrición (FEN), las setas son alimentos con un bajo contenido energético. Solo contienen 24 kcal por cada 100 g de porción comestible gracias a su alto contenido en agua.
Los níscalos son fuente de vitaminas como niacina, vitamina A y riboflavina, además de ser fuente de algunos minerales como hierro
''Contienen ergosterol, una sustancia que se encuentra en los tejidos vegetales y que puede transformarse en vitamina D. Gracias a la acción del sol, el ergosterol se convierte en provitamina D2, y en el organismo -en concreto en el riñón- se producen las formas activas de la vitamina D'', añade la FEN.
Además, destaca la FEN, los níscalos son fuente de vitaminas como niacina, vitamina A y riboflavina, además de ser fuente de algunos minerales como hierro (no se asimila tan bien como el de origen animal, porque la fibra de la verdura interfiere en su absorción a nivel intestinal) y potasio. Este último contribuye al funcionamiento normal del sistema nervioso y de los músculos.