El botiquín de los hospitales españoles es cada vez más grande.Tanto es así que, el gasto sanitario hospitalario alcanzó 45.017 millones en 2017, lo que significa un aumento de 6.570 millones de euros en comparación con cinco años atrás, cuando este fue de 38.447 millones. Así lo ha reflejado el último informe Sistemas de cuentas de Salud, publicado por el Ministerio de Sanidad y Consumo.
En este sentido, el gasto sanitario hospitalario representó el 42,9% sobre el gasto total en salud en España, que en 2017 fue de 104.928 millones de euros. Además, el desembolso de los proveedores de atención ambulatoria, con 26.065 millones, copó el 24,8%. Por su parte, los minoristas y otros proveedores de productos médicos, con un 22,1% sobre el total, contabilizaron un gasto de 23.145 millones de euros.
En España, en 2017, el gasto sanitario público y el gasto sanitario privado sumaron 74.150 millones y 30.779 millones de euros, respectivamente, según los datos aportados por el departamento de Salud.
El gasto sanitario hospitalario alcanzó 45.017 millones en 2017, lo que significa un aumento de 6.570 millones de euros en comparación con cinco años atrás
En el periodo de 2013-2017, los hospitales son el proveedor de atención de la salud que experimentó la mayor tasa anual media de crecimiento, cifrada en un 4%. Le sigue el suministro y administración de programas de salud pública, con un 3,5%; de los minoristas y otros proveedores de productos médicos, con un 2,4%; y de los proveedores de atención ambulatoria, con un 2%.
Por otro lado, en 2017, un 57,6% gasto sanitario total se destinó a servicios de asistencia curativa y de rehabilitación. Le siguen en importancia el gasto en productos médicos dispensados a pacientes ambulatorios, con un 22,1%; el gasto en servicios de atención de larga duración, con un 9,1%; y el gasto en servicios auxiliares de atención de la salud, que supuso un 4,9% del gasto sanitario total.
Asimismo, en 2017, el sector privado costeó el 41,6% del gasto en medicamentos y otros productos médicos perecederos y el 95,1% del gasto en dispositivos terapéuticos y otros productos sanitarios no perecederos.
A su vez, la atención hospitalaria representó el 65% del gasto en servicios de atención de larga duración; la atención domiciliaria, el 25%; y la atención en hospitalización de día, el 10%