La Neonatología es uno de los ámbitos sanitarios donde la humanización de los cuidados resulta un pilar fundamental. Destaca la entrega por parte de todo el equipo médico y de Enfermería en lograr el bienestar (mucho más allá de la salud) de los más pequeños y sus familias en entornos hospitalarios.
ConSalud.es charla con la presidenta de la Sociedad Española de Enfermería Neonatal (SEEN), María José Cano Ochoa, sobre la labor de estos profesionales de Enfermería y el trabajo de su sociedad científica por la divulgación de esta rama asistencial.
¿Cuál ha sido y es la evolución de la Enfermería Neonatal en España?
En la práctica, cuando se crean las Unidades Neonatales a finales del siglo XIX, en Francia y Alemania propagándose después a toda Europa y Estados Unidos, las enfermeras se incorporan al cuidado de los recién nacidos desarrollando habilidades y creando un cuerpo de conocimiento propio. Lógicamente ha ido evolucionando, adaptándose a los cánones del cuidado neonatal actual, cada vez más especializado y abriendo nuevas líneas de investigación para tener evidencia científica y basar los cuidados en esta.
La Neonatología es una rama de la Pediatría dedicada a la atención del recién nacido este sano o enfermo. El termino proviene etimológicamente de la raíz latina “natos” que significa nacer y “logos” que significa tratado o estudio, es decir el “estudio del recién nacido.
Se entiende por Enfermería Neonatal: aquella que presta cuidados al recién nacido desde el momento del parto, siempre que éste necesite atención urgente y/o cuidados específicos hasta la edad corregida de 28 días.
Así como en otros países se ha desarrollado la Residencia de Enfermería en Neonatología, en España está dentro de la Especialidad de Enfermería Pediátrica.
"Así como en otros países existe la residencia de Enfermería en Neonatología, en España, se ubica dentro de la Especialidad de Enfermería Pediátrica"
El primer intento de profesionalizar la Enfermería Pediátrica Española tiene sus orígenes en el año 1923 cuando se funda la Escuela Nacional de Puericultura de Madrid adscrita al Consejo Superior de Protección de la Infancia. Desde aquella fecha hasta la actualidad una serie de leyes y decretos han conducido a desarrollar la especialidad de Enfermería Pediátrica.
La Enfermería Pediátrica se diferenció como especialidad en España en 1964 (Decreto 3524/1964, de 22 de octubre). Pero el verdadero hito en la Enfermería Pediátrica en España es la aprobación del programa formativo de la especialidad en 2010. Sin él, en la actualidad no podría estar desarrollándose la especialidad en las unidades docentes de nuestro país; el programa es una guía para todas estas unidades. Este programa se aprobó tras la Orden SAS/1730/2010 del 17 de junio. Desde entonces hasta el día de hoy el camino no ha sido fácil. Una serie de Reales Decretos, Órdenes y resoluciones nos han llevado hasta el momento actual.
Al finalizar los estudios de Enfermería, todos los diplomados/graduados en Enfermería se consideran enfermeros generalistas. Tras la superación de un examen de Enfermero Interno Residente (EIR), de carácter estatal, que se realiza todos los años en las diferentes comunidades autónomas, los enfermeros generalistas pueden acceder a la formación de una de las especialidades desarrolladas actualmente:
¿Hacia donde debería crecer la profesión?
Hacia un reconocimiento. La atención al neonato es una Atención Especializada, es una “subespecialidad” dentro de la Pediatría. Creemos necesaria un Área de Capacitación Específica para la Enfermería Neonatal.
La población ingresada/atendida en una Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales, puede ser muy variada, pueden ser recién nacidos desde la semana 24 de gestación, recién nacidos pretérmino (RNPT), así como recién nacidos a término y postérmino, con diferentes problemas de salud y diversas patologías.
Estos pacientes, en el inicio de su vida, requieren unos cuidados especializados, sumamente complejos y con la necesidad de utilizar alta tecnología. La atención y la vigilancia son primordiales durante las 24 horas del día.
"La atención y la vigilancia de los neonatos son primordiales durante las 24 horas del día"
Hay pacientes, que por complicaciones graves de salud, deben estar ingresados por mucho más tiempo de lo normal, (6-7 meses de vida), pasando por los diferentes niveles asistenciales de Neonatología (Cuidados Intensivos, Cuidados Intermedios, hospitalización, Ingreso domiciliario)
También debemos considerar la atención a los padres y familias de estos recién nacidos, acompañarlos en estos momentos para que se vinculen con sus hijos y ejerzan su rol de padres, el de cuidar, alimentar y proteger a sus hijos, acompañarlos en el reconocimiento de su hijo y de sus necesidades les ayudará en el futuro.
¿Qué tipo de atención prestan?
El periodo neonatal comprende las primeras 4 semanas de vida. Empieza con la adaptación a la vida fuera de útero. La atención prestada será la adecuada a cada paciente, a cada momento de su vida y a los problemas de salud que presente, teniendo en cuenta el entorno familiar de cada niño.
La Enfermería neonatal se desarrolla principalmente en hospitales, va desde la atención al recién nacido sano ingresado en la planta de maternidad junto a su madre, a los recién nacidos (prematuros o no) con problemas de salud graves que requieren el ingreso en unidades especializadas. En la atención primaria se incluye en la consulta de Pediatría, médica y enfermera, dentro de la atención a la infancia y la adolescencia.
La presidenta de la Sociedad Española de Enfermería Neonatal (SEEN), María José Cano Ochoa. (Foto. SEEN)
Las competencias de la enfermera pediátrica están especificadas en el programa de la especialidad de Enfermería Pediátrica. La enfermera especialista en Enfermería Pediátrica es la profesional capacitada para proporcionar cuidados de Enfermería especializados de forma autónoma, durante la infancia y adolescencia, en todos los niveles de atención, incluyendo la promoción de la salud, la prevención de la enfermedad y la asistencia al recién nacido, niño o adolescente sano o enfermo y su rehabilitación, dentro de un equipo multiprofesional y en colaboración con enfermeras especialistas de otras áreas.
Todo ello con una actitud científica responsable ejercerá el liderazgo en el ámbito del cuidado al recién nacido, niño y adolescente, sano y con procesos patológicos agudos, crónicos o discapacitante, estando capacitada para planificar, ejecutar y evaluar programas de salud relacionados con su especialidad y desarrollar trabajos de investigación y docencia para mejorar la calidad de los servicios y colaborar en el progreso de la especialidad.
¿Cómo es la relación con los pacientes y sus familias?
En los inicios de la neonatología, los esfuerzos se centraron en el desarrollo de aspectos tecnológicos que permitieran la sobrevida de recién nacidos de alto riesgo, especialmente los nacidos extremadamente prematuros. Se inventó la incubadora (Dr.Tarnier 1880), se instauraron normas estrictas para el control de infecciones, separando a los recién nacidos de sus madres, restringiendo el acceso a estas unidades a los profesionales de salud. Hasta mediados del siglo XX, el paradigma de los cuidados en neonatología consideraba la incubadora como el hábitat del prematuro y al biberón como su medio de alimentación.
Cuando se dispuso de terapias antibióticas y las investigaciones demostraron los beneficios de admitir a los padres en las unidades de cuidados intensivos neonatales (UCIN) sin que se advirtiera un aumento de las infecciones, a finales de la década de los 60 se empezaron a abrir las puertas a las familias. Este proceso ha sido lento y dificultoso, especialmente en nuestro país ya que no es hasta el 2012 donde se objetiva que en un 82% de las Unidades Neonatales el acceso de los padres es libre.
El cuidado actual en las unidades neonatales se centra en las necesidades del recién nacido y de la familia integrando a los padres en el cuidado, formando parte del equipo.
¿Qué papel tienen los cuidados de enfermería neonatal en los más pequeños?
El cuidado en Enfermería Neonatal ha de tener una visión holística del binomio madre-hijo. Ha de valorar las necesidades y planificar los cuidados integrales favoreciendo el desarrollo neonatal. Es lo que algunos autores denominan como Cuidados Centrados en el Desarrollo y la Atención a la Familia, y se centra en los 8 principios básicos: acceso libre a los padres, apoyo psicológico, manejo del dolor, ambiente adecuado, posicionamiento, piel con piel, apoyo a la lactancia materna y protección del sueño.
Cuando decimos ambiente adecuado tenemos en cuenta el macro y microambiente. La regulación de niveles óptimos de luz y de ruido para facilitar su desarrollo neurosensorial. La presencia sin restricciones de los padres, que sean los cuidadores principales, la práctica del contacto piel a piel lo más precoz y durante el mayor tiempo posible. El cuidado de la posición y de la contención de su cuerpo en todo momento y cuidando de proporcionarle un nido fuera y dentro de la incubadora. Manejo del dolor (evitar, prevenir, medir y tratar tanto con medidas no farmacéuticas o farmacéuticas si son necesarias). Proteger el sueño, favorecer la estimulación adecuada y promover la lactancia materna.
En la Neonatología actual el hábitat de los recién nacidos prematuros al igual que todos los recién nacidos ingresados en una Unidad Neonatal es el cuerpo de la madre o de otro familiar que la sustituya, y la leche materna como el modo ideal de alimentar a un recién nacido.
El apoyo a la lactancia es muy importante en nuestro entorno. Es necesario que tengamos los conocimientos adecuados y actualizados, así como las habilidades necesarias para acompañar a las madres en sus decisiones, ya sea la iniciar o inhibir o reiniciar su lactancia, escuchándolas y comprendiéndolas, fortaleciendo su confianza y apoyándolas dando respuestas a las diferentes situaciones que se planteen. Al mismo tiempo y desde el conocimiento del desarrollo del recién nacido las enfermeras neonatales acompañaran a la madre y su hijo durante este proceso, atendiendo a las características de cada uno prestando atención a las conductas neonatales.
"El enfermero neonatal debe fomentar la interacción entre el recién nacido y su familia"
En el 1986 la doctora Heidelise Als crea el Método NIDCAP (Newborn Individualized Developmental Care and Assesment Program). En su artículo 'Early Experience Alters Brain Function and Structure', la doctora Als explica que a través de la observación, el RN nos enseña sus necesidades y su capacidad de interactuar con el entorno, y se establecen recomendaciones de cuidados para favorecer su desarrollo. Es importante dar estímulos adecuados y favorecedores del desarrollo evitando estímulos estresores que pueden influir negativamente en su desarrollo neurosensorial.
Un papel importante del enfermero neonatal es fomentar la interacción entre el recién nacido y su familia, de fomentar el desarrollo óptimo guiándose de las señales que emite el recién nacido para saber en qué momento y durante cuánto tiempo están listos para recibir una interacción apropiada. Esto ayudará a regular las respuestas fisiológicas del recién nacido, ayuda a la organización neuroconductual mejorando la autorregulación y los resultados a largo plazo. Disminuye el tiempo necesario para iniciar la alimentación enteral, aumenta la ganancia de peso y reduce el tiempo de hospitalización.