Clopidogrel: cuándo y cómo debemos tomarlo

El videoconsejo sanitario de esta semana se centra en qué es el medicamento clopidogrel, para qué sirve y cómo y cuándo se administra.

La farmacéutica Elena Vega aborda el medicamento clopidogrel.
La farmacéutica Elena Vega aborda el medicamento clopidogrel.

El videoconsejo sanitario de esta semana de #TuFarmacéuticoInforma se centra en el medicamento clopidogrel, para qué sirve y cuándo y cómo debemos administrarlo.

Tal y como explica la farmacéutica Elena Vega, el clopidogrel es un antiagregante plaquetario, es decir, reduce la agregación entre las plaquetas, unos elementos de nuestra sangre cuya funciónes formar coágulos. Por tanto, el clopidogrel hace que la sangre tenga una menor tendencia a formar coágulos, principalmente en los vasos sanguíneos, en las arterias,un proceso conocido como aterotrombosis, y que puede provocar efectos aterotrombóticos, como infarto cerebral, infarto de miocardio o muerte.

Así pues, este medicamento se va a emplear en adultos para la prevención secundaria de enfermedades debidas a trombos, como la angina de pecho, el infarto de miocardio o el ictus de tipo no hemorrágico.

La dosis diaria habitual es 75 mg, administrado sin alimentos y a la misma hora cada día. "Si has sufrido dolor torácico grave (ya sea por una angina de pecho o por un infarto), has experimentado síntomas de un ictus que desaparecen en un corto período de tiempo o has padecido un ictus isquémico de gravedad leve, tu médico puede prescribirte una dosis mayor de clopidogrel que puede ser desde 300 mg a 600 mg, con el fin de que lo tomes una única vez al inicio del tratamiento", apunta la farmacéutica Vega.

En el mercado, clopidogrel solo se encuentra en forma de comprimidos, los cuales deben tragarse enteros con suficiente cantidad de agua y sin masticar.

Debido a la capacidad del fármaco para favorecer la aparición de hemorragias, no se debe usar en caso de que se tengan alteraciones de la coagulación o enfermedades que pudieran dar lugar a hemorragias internas, como por ejemplo la úlcera gastroduodenal.

En cuanto a las interacciones, el clopidogrel puede potenciar el efecto del ácido acetilsalicílico. No obstante, esta combinación se emplea con frecuencia, aunque requiere de un control por parte del médico. Por tanto, "respeta la pauta establecida por el médico y no suspendas ninguno de los fármacos sin su recomendación", apunta.

Los efectos adversos más frecuentes en el tratamiento con clopidogrel son la aparición de hemorragias en el estómago o intestino, las magulladuras, los hematomas o la hemorragia nasal, entre otras.

Si te cortas o te haces una herida es posible que la hemorragia tarde un poco más de lo normal en detenerse. Esto está relacionado con el mecanismo de acción del medicamento, ya que como hemos comentado anteriormente, previene la capacidad de la sangre para formar coágulos.

Para cortes o heridas de poca importancia, como por ejemplo cuando te cortas durante el afeitado, esto normalmente no tiene importancia. "Sin embargo, si estás preocupado por tu hemorragia, debes consultar con tu médico inmediatamente", señala Vega.

"Y recuerda, pregunta siempre a tu farmacéutico de confianza. Te informaremos sobre cómo debes tomar clopidogrel y sobre cualquier otra duda que tengas", concluye la farmacéutica.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
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