Las comunidades autónomas ya tienen en su poder el documento que deben remitir semanalmente al Ministerio de Sanidad y en base al cual el departamento que dirige Salvador Illa decidirá si los distintos territorios pueden pasar de fase en el proceso de desescalada. Se trata de una especie de examen cuyo título es “Informe de las capacidades estratégicas sanitarias dentro del Plan de Transición hacia una nueva normalidad”.
Este documento, al que ha tenido acceso ConSalud.es, reclama de las comunidades autónomas información muy concreta sobre aquellos territorios o niveles territoriales propuestos para que avancen en la fase de desconfinamiento. Así, se analizan cuatro parámetros concretos: las capacidades de asistencia sanitaria; el modelo de alerta y vigilancia epidemiológica; la identificación y contención de las fuentes de contagio; y el reforzamiento de las medidas de protección colectiva.
El Ministerio reclama a las CC.AA. detalles de cómo Atención Primaria puede garantizar la capacidad diagnóstica con PCR y pide un plan de preparación en los hospitales para prevenir nuevos brotes
Pero antes de ello, cada Gobierno autonómico debe informar de forma general qué nivel territorial propone (municipio, comarca, isla, provincia, CC.AA. u otro), cuánta población reside en dicho territorio y qué actividades sociales y económicas destacan en él (por ejemplo, principales actividades económicas, patrones de movilidad, núcleos industriales, características de la población, etc.).
ASISTENCIA SANITARIA: PRIMARIA, HOSPITALARIA Y MATERIALES
En primer lugar, las consejerías de Sanidad de las distintas autonomías tienen que detallar en qué circunstancias pueden garantizar la asistencia en Atención Primaria. Así, el Ministerio quiere saber cómo van a garantizar la capacidad diagnóstica con PCR en este nivel asistencial, cómo ejercerán la “prevención y control” ante casos sospechosos y cómo mantendrán la atención “a la casuística habitual”. En cuanto indicadores específicos, pedirán el número diario de “casos sospechosos, casos sospechosos con PCR, con PCR + y con PCR + en seguimiento domiciliario”.
Con respecto a la Atención Hospitalaria, el Gobierno reclama un plan de preparación que responda a un “incremento rápido de capacidades” con información sobre casos sospechosos en este nivel (incluyendo urgencias y hospitalización), la ocupación de camas de hospitalización de agudos y de UCI o el total de recursos que podrían movilizarse en un “plan de acción rápida” (centros no sanitarios y camas en disposición de medicalizar, camas de agudos y UCI que se podrían incrementar o nº de respiradores en reserva).
Por otra parte, el Ministerio pide que las autonomías detallen las reservas estimadas de materiales esenciales en todos los niveles asistenciales. En concreto, reclaman la cantidad y los días cubiertos con: material como EPI y ropa de protección (mascarillas quirúrgicas, FFP2 y 3, batas desechables, gafas o pantallas faciales); medicación específica para pacientes críticos; solución hidro-alcohólica; PCR (hisopos para toma de muestras, kits o reactivos para PCR) y envases.
Las autonomías informarán sobre los planes de contingencia previstos en las residencias de mayores o los dispositivos existentes para aislar a casos que no pueden hacerlo en su domicilio
Finalmente, a nivel asistencial deben precisar las capacidades de sus laboratorios, atendiendo al número diario máximo de PCR que se podrían realizar de forma total y al número diario de las pruebas realizadas: PCR, test rápidos de anticuerpos y test serológicos realizados (modelos ELISA, QLIA, EQLIA).
ALERTA Y VIGILANCIA EPIDEMIOLÓGICA
Las comunidades autónomas también están obligadas a describir sus sistemas de información para la vigilancia de Covid-19 y comunicar si los servicios de salud pública “tienen capacidad para la detección de casos” y enviarlos a la red nacional. En cuanto a indicadores, deben notificar cuántos profesionales de vigilancia epidemiológica están dedicados al virus, así como los casos confirmados por PCR, los no hospitalizados, acumulados hospitalizados, ingresados en UCI y de casos en personal sanitario.
FUENTES DE CONTAGIO
Desde el Gobierno también demandan una información detallada sobre la capacidad de identificación y contención de las fuentes de contagio por parte de las autonomías. De forma particular, Sanidad requiere especificación sobre cómo se realiza el diagnóstico temprano, los dispositivos existentes para aislar a casos que no puedan hacerlo en su domicilio o los planes para incorporar a recursos humanos en caso de que se dé un repunte.
El Ministerio pide información sobre cómo están realizando el reparto de mascarillas, si están implantando señales de distanciamiento físico o si prevén controles de tráfico específico
En materia de trazabilidad y la cuarentena de casos, quieren saber, entre otras cosas, si está haciendo un “seguimiento de todos los contactos estrechos de los casos” así como el número de estos casos. Asimismo, el Ministerio pide información sobre los planes de contingencia en las residencias de mayores y otros centros sanitarios, reclamando las acciones realizadas, el número de fallecidos en estos centros o los casos confirmados en trabajadores sociosanitarios.
REFUERZO DE LA PROTECCIÓN COLECTIVA
Finalmente, el documento de Sanidad solicita de las autonomías las medidas de “promoción de la salud y prevención” que están tomando para “reducir la transmisión del coronavirus” así como las actuaciones de “control de la movilidad que se podrían instaurar entre territorios” en diferentes fases. Por ejemplo, preguntar por cómo se está realizando el reparto de mascarillas, si están implantando señales de distanciamiento físico, si prevén controles de tráfico específico o cómo se reforzará la vigilancia del tránsito peatonal.