Davide Damiano: "Nos llaman héroes, pero la verdad es que formamos parte de las víctimas"

Davide Damiano, médico de Atención Primaria en Bolonia (Italia), relata cómo están luchando los sanitarios italianos contra el coronavirus. Denuncia el "abandono" al personal sanitario por parte de las administraciones públicas.

Davide Damiano, médico de Familia en Bolonia (Italia)
Davide Damiano, médico de Familia en Bolonia (Italia)
Nacho Cortés
20 abril 2020 | 00:00 h

Italia fue y es el reflejo en el que España se ha estado viendo a la hora de gestionar la pandemia de coronavirus Covid-19. Países vecinos, cultura e idiosincrasia muy parecida, con una población altamente envejecida y un sistema sanitario mermado por los recortes de las dos últimas décadas.

El simil ha sido siempre una constante, ya que Italia y España son los dos países de Europa con más contagiados y fallecidos por Covid-19, y también del mundo, solo superados por Estados Unidos.

ConSalud.es conversa con Davide Damiano, médico de Medicina General y Comunitaria, en la Casa della Salute de San Lazzaro di Savena, en Bolonia (Italia). Este facultativo italiano relata en primera persona como está siendo la lucha de los sanitarios en el país vecino y desgrana las similitudes con la crisis sanitaria en España.

¿Cómo están viviendo la situación allí?

Los sentimientos prevalecientes que tengo sobre la emergencia de Covid-19 son de preocupación, frustración e impotencia. Más allá de la dificultad de identificar y tratar a las personas con Covid-19, existe una conciencia general por parte del personal sanitario de que han sido abandonados por las instituciones de salud tanto locales como nacionales.

No disponemos de dispositivos de protección adecuados y suficientes, por lo que muchos sanitarios están enfermando y muriendo, tenemos pocas y confusas indicaciones operativas y, en todo esto, obviamente nuestro trabajo se ha vuelto más exigente y estresante.

"No disponemos de dispositivos de protección adecuados y suficientes, por lo que muchos sanitarios están enfermando y muriendo"

En los medios de comunicación nos llaman "héroes", pero la verdad es que formamos parte de las "víctimas": víctimas de los recortes de la salud pública realizados en Italia en los últimos 20 años, víctimas de un sistema que nos protege y valora poco. Muchos médicos que han ido migrando al extranjero desde hace muchos años.

En Italia hay una atmósfera extraña, con una narración predominante que alaba el patriotismo, la solidaridad y la disciplina.

Sin embargo, pocos reflexionan realmente sobre lo que nos muestra este estado de emergencia y cuarentena nacional, cuáles son las contradicciones que surgen sin piedad: la falta de protección de los más marginados (personas sin hogar, migrantes, prisioneros amontonados en pequeñas celdas, etc.); desinformación general con noticias falsas que viajan (más virales que la Covid-19) en las redes sociales y los sitios web; políticas que especulan con el tiempo de sufrimiento de la gente; gastos militares estatales que siguen aumentando, un estilo de vida globalizado y consumista que ha contribuido a amplificar toda esta crisis nacional y mundial.

¿Qué medidas se han tomado? ¿Están siendo eficaces?

La cuarentena nacional era una medida necesaria, pero impuesta demasiado tarde, cuando el coronavirus ya estaba enormemente extendido, especialmente en el norte de Italia.

Este error se cometió con el fin de "proteger la economía", con el resultado desalentador de haber ayudado a enfermar a tantos trabajadores y sus familias. Esto también debería llevarnos a reflexionar sobre las prioridades de una sociedad.

Ahora estamos empezando a ver los primeros resultados de esta medida de restricción, pero el camino para volver a una restauración de todas las libertades individuales que teníamos antes de la emergencia, es todavía muy largo...

"Cada región italiana se ha organizado a su manera, lo que ha provocado grandes desigualdades en el abordaje del coronavirus"

A nivel sanitario, lamentablemente, no se ha hecho lo suficiente, sobre todo en las primeras semanas de la epidemia, y se ha hecho de manera demasiado desarticulada. Las distintas regiones italianas tienen una gestión semiautónoma de la atención sanitaria, por lo que cada una se ha organizado a su manera, lo que ha provocado grandes desigualdades en el tratamiento de la emergencia y mucha confusión sobre las cifras estadísticas reales de la epidemia.

¿Cuándo cree que alcanzarán el pico de la epidemia? ¿Cuándo terminará el confinamiento?

La reducción significativa de los casos no se producirá rápidamente. Creo que sólo podremos hablar de una reducción gradual de las medidas de restricción de la libertad de movimiento en unas pocas semanas, tal vez en mayo ...

¿Hay personal sanitario suficiente? ¿Y material de protección? ¿Cómo están los hospitales?

Me temo que no. En los últimos 20 años, en nombre de la racionalización de los recursos y el ahorro, se han hecho enormes recortes en el sistema sanitario, en términos de camas, personal sanitario, formación...

Hoy en día estamos pagando más que nunca las consecuencias: las unidades de cuidados intensivos del norte de Italia llevan semanas colapsando, muchos otros centros hospitalarios se encuentran en estado de alerta debido a la falta de trabajadores y medios sanitarios, los dispositivos de protección son a menudo inadecuados y siempre insuficientes.

"Estamos pagando más que nunca las consecuencias de los enormes recortes se hicieron en la sanidad italiana"

Muchos profesionales sanitarios están enfermando pero siguen trabajando, contribuyendo así a propagar la infección entre los pacientes, los compañeros y los familiares.

¿Cómo se está abordando la lucha contra el Covid-19? 

Cada región tiene su propio camino. En Emilia Romagna, donde vivo, se realizan pocos test, también porque el servicio de salud pública que debería gestionar su logística es un caos debido a la enorme cantidad de trabajo que repentinamente tienen y con poco personal al frente.

Los test rápidas aún no son rutinariao. Están empezando a experimentar con la terapia temprana en el hospital y en las casas con hidroxicloroquina y antivirales, con la esperanza de que esto reduzca aún más la proporción de personas que empeoran y necesitan ser hospitalizadas.

¿Qué consideran que es lo más duro de lo que están viviendo?

No poder estar cerca de los seres queridos. En parte por las medidas de cuarentena, en parte por la preocupación de poder transmitir el virus.

Dada mi profesión, estoy muy expuesto a un posible contagio, con una protección inadecuada e insuficiente. Puedo haber contraído la Covid-19 sin saberlo, también porque nadie me ha hecho nunca un test y, a menos que desarrolle síntomas importantes, creo que nadie lo hará nunca.

¿Cree que las medidas implantadas en España e Italia están siendo eficaces?

Por lo que he leído sobre la situación española, me parece que están pasando por las mismas fases que nosotros ya hemos pasado, simplemente más desfasadas con el tiempo. Lamento que el ejemplo de Italia no haya llevado a otros países a equiparse y protegerse mejor y a tiempo.

¿Qué le piden al Gobierno?

Escuchen a los sindicatos del sector salud, que continúan trabajando con gran demostración de compromiso profesional y humano, sintiéndose a menudo abandonados por las instituciones.

Desplegar recursos para proteger a los grupos más marginados de la sociedad, que en esta emergencia son los que más sufren por la falta de un lugar donde alojarse y de servicios básicos para vivir.

Reflexionar sobre cómo la pasada devaluación de los sectores públicos prioritarios para la vida de un país está emergiendo, de forma dramática: escuela, universidad, investigación, salud, servicios sociales básicos. Comenzar de nuevo, después de esta emergencia, centrándose en una seria reorganización y reconstrucción de estos pilares de un estado democrático que se define como tal.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
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