INCLIVA participa en un ensayo para retrasar el uso de quimioterapia en pacientes con cáncer de mama

El ensayo internacional conocido como ALPHABET cuenta con la participación de 110 centros de 6 países diferentes

El doctor Alejandro Pérez-Fidalgo, investigador de INCLIVA y GEICAM (Foto. INCLIVA)
El doctor Alejandro Pérez-Fidalgo, investigador de INCLIVA y GEICAM (Foto. INCLIVA)
Ander Azpiroz
12 enero 2022 | 11:55 h

INCLIVA participa en el ensayo clínico Fase III ALPHABET, que se trata de un estudio académico que busca demostrar que existe una alternativa que evite los efectos secundarios de la quimioterapia en pacientes con cáncer de mama metastásico HER2+ y mutación del gen PIK3CA.

HER2+ representa aproximadamente el 20% de los casos de cáncer de mama​, la investigación sobre este subtipo ha conseguido mejorar el pronóstico en los estadios iniciales y avanzados. Aún así alrededor del 30% de las pacientes que sufren esta enfermedad tienen recaídas y metástasis.

Actualmente, hay evidencia científica de que las mutaciones de PIK3CA confieren una resistencia adicional a tratamientos en general y a las terapias anti-HER2. Por ello se consideró de gran interés la necesidad del desarrollo de nuevas técnicas que incluyeran la combinación de fármacos que bloqueen HER2 (trastuzumab) y otros compuestos destinados a superar la resistencia a las terapias anti-HER2 causada por las mutaciones en PIK3CA.

“Si la utilización de esta doble terapia dirigida resultara superior a quimioterapia más trastuzumab, se abriría el camino a evitar los efectos secundarios de la toxicidad de la quimioterapia"

El doctor Alejandro Pérez-Fidalgo, investigador de INCLIVA y GEICAM y oncólogo médico del Hospital Clínico de València, es el coordinador médico de la investigación y lidera el estudio junto con la doctora Carmen Criscitiello, profesora asociada de la Universidad de Milán e investigadora del Instituto Europeo de Oncología de Milán, y el doctor Philippe Bedard, profesor asociado de Medicina en la Universidad de Toronto y oncólogo médico en el Princess Margaret Cancer Centre de Toronto.

En total colaboran 110 centros de seis países, formando un conjunto de 300 pacientes que participarán en el ensayo. La presencia de España es de 55 centros entre los que se encuentran: INCLIVA, Hospital General, Hospital Arnau de Vilanova e IVO, en València; Hospital General de Alicante; y Hospital General de Elche.

En concreto, la Unidad de Medicina de Precisión de INCLIVA ha sido elegida como centro de screening internacional para la realización de mutaciones PI3KCA, con la colaboración del Laboratorio del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz de Madrid. Además, el Comité Ético de Investigación Clínica (CEIC) de INCLIVA ha sido seleccionado para centralizar este estudio clínico en España.

Los objetivos de este estudio se centran en determinar en dos muestras de pacientes con cáncer de mama avanzado HER2+ con mutación del gen PIK3CA según la expresión de sus receptores hormonales (RH), si el inhibidor de PI3K alpelisib junto con trastuzumab posee una eficacia superior a la combinación de trastuzumab con la quimioterapia, determinada por la prolongación de la supervivencia libre de progresión. Además tratarán los objetivos secundarios, como la respuesta, la toxicidad y la calidad de vida de las pacientes con los tratamientos aplicados.

“Sería muy positivo poder determinar las alteraciones del gen mediante un análisis de sangre porque ganaríamos en dinamismo y evitaríamos los riesgos que conllevan las biopsias de tejido"

Por lo tanto los pacientes que presenten receptores hormonales positivos (RH+) serán aleatorizadas a recibir trastuzumab junto con fulvestrant (antiestrógeno) y alpelisib o quimioterapia y trastuzumab. Si presentan receptores hormonales negativos (RH-), serán aleatorizadas a recibir trastuzumab junto a alpelisib frente a quimioterapia y trastuzumab.

El doctor Pérez-Fidalgo explica: “Si la utilización de esta doble terapia dirigida (alpelisib más trastuzumab) resultara superior a quimioterapia más trastuzumab, se abriría el camino a evitar los efectos secundarios de la toxicidad de la quimioterapia a los pacientes cuyos tumores generan resistencia a los anti-HER2 por presentar una mutación de PIK3CA, y con ello tendrían una mejor calidad de vida”.

“Sería muy positivo poder determinar las alteraciones del gen mediante un análisis de sangre porque ganaríamos en dinamismo y evitaríamos los riesgos que conllevan las biopsias de tejido, aparte de que, gracias a las muestras de sangre de los pacientes participantes en el ALPHABET, aumentaremos el conocimiento sobre el cáncer de mama”, concluye Pérez-Fidalgo.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
Lo más leído