Navidad son fechas muy especiales, marcadas por los reencuentros familiares y las vueltas al hogar. Se suele tratar de días muy esperados y especiales sin embargo, no para todo el mundo son días felices. Hay quien los pasa ingresados en el hospital, muchos de ellos niños.
El área materno infantil del Hospital La Paz, una de las más importantes del país, cuenta actualmente 240 camas destinadas a menores de edad, de las cuales unas 220 están ocupadas, aunque esta cifra varía dependiendo de la zona del año.
El Hospital La Paz cuenta con 240 camas para niños, de las cuales unas 220 suelen estar ocupadas
Ante el elevado número de menores que se encuentran hospitalizados es muy importante que desde los hospitales se realicen actividades que hagan su día a día más llevadero. Esto es lo que lleva a La Paz a realizar distintas actividades todos los días. Pero durante las vacaciones de inverno se intensifican.
El área materno infantil del Hospital cuenta con una zona llamada La Pajarera donde los niños pueden disfrutar de diferentes juegos y actividades, que cambian con la llegada de la Navidad. “Hay una fiesta de Navidad, donde hay sorpresas y regalos”, explican desde el Hospital a ConSalud.es.
Durante esta fiesta los niños tienen la oportunidad de disfrutar de actuaciones de distintos artistas, el año pasado por ejemplo, un grupo de actores de El mago de Oz les representaron varios fragmentos de la obra.
Todo niño ingresado, aunque lleve un día, tendrá un regalo el día de reyes
Además, a lo largo de las vacaciones los niños pueden disfrutar de diferentes visitas de personas reconocidas, que en la mayoría de los casos les llevan regalos “algo que siempre les hace mucha ilusión”.
Aunque la actividad favorita tanto para los niños como para los profesionales del Hospital es la cabalgata de reyes. Y es que, al igual que el resto de niños del país, los pacientes menores ingresados en el hospital durante la noche más mágica del año tienen la oportunidad de conocer en persona a los tres magos de Oriente acompañados de sus pajes. Que además de visitarlos e informarse por su estado de salud les dejan un regalo en los zapatos que previamente han colocado en la puerta.
Sus majestades no solo se acuerdan de los niños que han escrito que han enviado la carta desde el hospital, “todo niño hospitalizado, aunque lleve un día, recibe un regalo, dos o los que se pueda ese año”, explican desde La Paz.
