LosServicios de Medicina Intensiva disponen de protocolos de actuación específicos ante la situación de epidemia de gripe. Cuando se pone de manifiesto un incremento de casos, en la mayoría de Unidades ya se establecen protocolos que permiten el diagnóstico precoz a través de determinaciones como la PCR de la gripe de estos pacientes. En los casos de sospecha, especialmente en pacientes que ingresan por insuficiencia respiratoria aguda en el contexto de una posible infección, se realiza el aislamiento del paciente de forma preventiva para evitar su propagación y se inicia el tratamiento específico farmacológico con oseltamivir hasta recibir los resultados que confirman, o no, la existencia de gripe. Existen también recomendaciones elaboradas por la Semicyuc en el que se establecen las medidas preventivas y terapéuticas en el manejo de este tipo de infecciones.
Durante el período de gripe, no solo en las UCI, sino también en los Servicios de Urgencias y en hospitalización se incrementa la demanda asistencial por esta patología. Algunos pacientes crónicos pueden descompensarse y requerir hospitalización, y en los casos más graves, ingresar en las Unidades de Cuidados Intensivos. En las semanas con una mayor incidencia de gripe, muchas unidades han tenido que incrementar su dotación de camas y de profesionales reforzando las plantillas para dar respuesta a estas necesidades. Algunos Servicios de Medicina Intensiva han extendido su actividad fuera del espacio de la UCI ocupando camas de monitorización en otras áreas para atender a estos pacientes.
"Los SMI han dado una respuesta adecuada al ser capaces de incrementar la actividad sin reducir de forma significativa la atención de otros pacientes críticos"
Por su parte, la Presidenta de la Semicyuc, Mari Cruz Martín Delgado, declaró: “Podemos decir que, en estas circunstancias, los SMI han dado una respuesta adecuada al ser capaces de incrementar la actividad sin reducir de forma significativa la atención de otros pacientes críticos. Es verdad que ello supone un esfuerzo organizativo tanto de recursos personales como de equipos, adaptando los recursos a las necesidades de forma dinámica. Ello ha sido posible en la mayoría de ocasiones colaborando con el resto de hospital y priorizando el ingreso de los pacientes más graves en nuestras unidades a la vez que se ha incrementado la actividad fuera de ellas para dar soporte en los Servicios de Urgencias y áreas de hospitalización. Como siempre cuando ocurren picos de actividad asistencial, se produce cierto colapso en los Servicios que atienden en primera instancia a estos pacientes, como en los Servicios de Urgencias y en la disponibilidad de camas para un mayor número de ingresos sin reducir la actividad habitual. En estos momentos puntuales, las demandas pueden crear cierto grado de alarma en la población”
EL TRATAMIENTO ANTIVIRAL
Existe aún controversia sobre la necesidad y efectividad de administrar medicación antiviral en pacientes afectados de gripe. “Los estudios randomizados y controlados han demostrado que la administración de oseltamivir (el antiviral más utilizado) disminuye los síntomas de la enfermedad en 1 día. Sin embargo, no se han llevado a cabo estudios así sobre el impacto del tratamiento con oseltamivir en pacientes graves ingresados en las UCIs. Diversos estudios observacionales han evidenciado un efecto favorable del tratamiento antiviral en los pacientes graves”, aseguró el doctor Rodríguez.
Aunque la OMS ha retirado el oseltamivir de la lista de medicamentos esenciales, aun en contra de la opinión del propio comité de expertos, los CDC y diferentes sociedades científicas continúan recomendando el tratamiento antiviral en los pacientes graves, especialmente en aquellos infectados con virus A (H1N1)pdm.