Conciliar en la profesión médica, un derecho difícil de conseguir: "Tenemos plantillas ineficientes"

La responsable de Igualdad del CESM, Rocío Fernández, confiesa a ConSalud.es que, en general, “es difícil conciliar”, entre otras razones, porque “tenemos plantillas que no son eficientes, son irreales y están concebidas para los médicos de los años 80"

Médico de brazos cruzados (Foto. Freepik)
Médico de brazos cruzados (Foto. Freepik)
Agustina Uhrig
27 abril 2022 | 00:00 h

Hace unas semanas, Carmen Calvo encendía las redes sociales con un "desafortunado" comentario sobre los médicos. La que fuera vicepresidenta del Gobierno afirmaba ante la prensa que quería “un cambio, que a las 17h de la tarde las personas estemos ya en nuestra casa, con nuestros hijos e hijas, con los mayores, haciendo nuestra vida, yendo al médico, a donde sea”.

Al hilo de estas declaraciones, los sanitarios, en general, y los médicos, en particular, alzaban la voz para recordar que también son personas y, por ende, también quieren conciliar, aunque no siempre sea fácil.

La responsable de Igualdad de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), la Dra. Rocío Fernández, confiesa a ConSalud.es que, en general, “es difícil conciliar”. Entre otras razones, porque “tenemos plantillas que no son eficientes, son irreales y están concebidas para la profesión médica de los años 80”.

La conciliación no es únicamente cuestión de tiempo y horarios, sino que tiene mucho que ver con la retribución económica

En esta época, el 80% de los médicos eran hombres, mientras que ahora es justo lo contrario: el 80% de las plantillas están conformadas por mujeres. “Creo que es igual de difícil para todos, pero para la mujer en lo práctico a lo mejor es más difícil”, comenta Fernández. Y es que el cuidado de los niños, el hogar y las personas mayores, aún recae en demasiadas ocasiones y de forma desigual, sobre ellas.

Con todo, el hecho de que las plantillas no sean eficientes se traduce en que, cuando una profesional solicita un permiso de maternidad, por ejemplo, el resto de profesionales estén sobrecargados, una vez que el trabajo de la persona que falta es asumido por el resto del equipo. Esto no ocurriría con una planificación de recursos humanos adecuada. 

Asimismo, Fernández explica que la conciliación no es únicamente cuestión de tiempo y horarios, sino que tiene mucho que ver con la retribución económica. Por ejemplo, la adaptación del puesto de trabajo por embarazo o lactancia, se traduce en un perjuicio económico. Y es que las mamás o futuras mamás que no hacen guardias (son obligatorias) por su situación, dejan de percibir estas retribuciones. “Justo cuando más las necesitas, no se te abonan, y son un tercio del sueldo”, apunta Fernández.

El cuidado de las personas mayores o el cuidado personal pasados los 55 años, así como el tiempo libre también son aspectos clave que deben tenerse en cuenta cuando hablamos de conciliación

En este sentido, también los horarios “malos” deberían ser compensados económicamente. Recordando las palabras de la exvicepresidenta Carmen Calvo, la Dra. Fernández insiste en que los horarios más delicados deberían estar mejor pagados "porque a todos nos gustan menos y dañan nuestra vida personal. Y eso también es salud”.

POSPONIENDO LA MATERNIDAD

La situación de inestabilidad de la profesión médica se traduce en que muchas profesionales posponen el momento de ser madre hasta llegar a una situación “mejor”. El problema llega cuando nunca es el momento ideal. “Entre la carrera, el MIR, encontrar un buen contrato… Si esperas a todo, te pones a ser madre primeriza con más de 30 años, con todos los riesgos que reporta”, comenta la Dra. Fernández.

El cuidado de las personas mayores o el cuidado personal pasados los 55 años, así como el tiempo libre también son aspectos clave que deben tenerse en cuenta cuando hablamos de conciliación. Aumentar las plantillas es uno de los puntos que favorecería la conciliación para esta portavoz del CESM: “Tener plantillas superiores a las de ahora permitiría una mejor organización y mayor flexibilidad para que un permiso de un compañero no suponga una sobrecarga para el resto del equipo”, matiza Fernández.

Tener servicios de guardería en las áreas de salud o en los centros de salud o establecer turnos de mañana y tarde que permitan el descanso, sin que ello suponga una pérdida retributiva, son otra de las claves para favorecer la conciliación.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
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