El auge de las bacterias multirresistentes, motivado en buena parte por el excesivo consumo de antibióticos a nivel mundial, es una preocupación ya presente en el ámbito sanitario. Por ello, la mayoría de expertos coinciden en la necesidad de que se pongan en marcha medidas a corto plazo para que se empiecen a ver resultados y no supongo una amenaza mayor.
Esta es una de las conclusiones a las que se ha llegado en la reunión anual de la Asociación de Microbiología y Salud (AMYS), celebrada esta semana en Madrid. En ella, los ponentes coincidieron en que son precisas soluciones “rápidas y globales” que, además, repercutan sobre varios sectores debido a la complejidad del asunto.
Formación para los profesionales, diagnósticos más seguros y el control de la infección, soluciones que ha propuesto el Dr. Ramón Cisterna, presidente de AMYS, frente a la resistencia antimicrobiana
Según ha apuntado a ConSalud.es el presidente de esta asociación, el Dr. Ramón Cisterna, las tres actuaciones más rápidas que se pueden aplicar son: una mejor educación y formación a los profesionales sanitarios para que se prescriban antibióticos “exclusivamente cuando sea necesario”; desarrollar métodos de diagnósticos “rápidos, seguros y fiables”; y mejorar las medidas de control de infección, con la higiene de manos como ejemplo básico.
LÍMITE DE RECURSOS TERAPÉUTICOS
Otros ponentes presentes en la reunión señalaron que uno de los principales problemas de la multirresistencia era la “limitación de recursos terapéuticos” para combatir las distintas infecciones. Sobre este asunto, señalaban que era necesaria la apuesta por “nuevos tratamientos efectivos” y el impulso de nuevas investigaciones para que se desarrollen nuevos antibióticos que traten las bacterias multirresistentes que actualmente resultan más peligrosas.
Los expertos pusieron de ejemplo el impaco de la vacunación contra la enfermedad neumocócica invasiva como herramienta frente a la resistencia antimicrobiana
En este sentido, llevaron al congreso el caso de la tuberculosis. Y es que, en los últimos años ha aumentado los casos de multirresistencia relacionadas con esta enfermedad, convirtiéndola en la primera causa de muerte global por agentes infecciosos y la novena a nivel general. En este punto, los expertos en Microbiología que asistieron a la reunión reclamaron una mayor implicación de la industria farmacéutica para que desarrollen nuevos antibióticos frente a esta enfermedad.
Por su parte, los ponentes pusieron de ejemplo el impacto de la vacunación como herramienta frente a la resistencia antimicrobiana. En concreto, mencionaron la dosis contra la enfermedad neumocócica invasiva (ENI) en aquellos casos producidos por cepas multirresistentes. Así, aseguraron que el éxito se debe al potencial de la nanotecnología y al de las propias vacunas bacterianas.