La tasa de vacunación de los sanitarios europeos no alcanza ni el 25%

Una cifra muy lejana al 75% que la Organización Mundial de la Salud recomienda en grupos de riesgo.

Un 13,10% de la plantilla de profesionales del SAS en Málaga ha sufrido algún tipo de agresión en los 10 años analizados
Un 13,10% de la plantilla de profesionales del SAS en Málaga ha sufrido algún tipo de agresión en los 10 años analizados
CS
24 octubre 2017 | 00:00 h

El inicio de la campaña de vacunación contra la gripe en la mayoría de las autonomías españolas pone de relieve una vez más que la cobertura de este tipo de prevención entre los trabajadores de sanitarios está lejos de ser la adecuada. Tal y como destaca el Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría, este panorama se debe fundamentalmente a una baja percepción del riesgo de enfermedad y a dudas sobre la efectividad y seguridad de determinadas vacunas por parte del personal sanitario, pese al empeño de los departamentos de sanidad por alcanzar el 75% de la tasa de vacunación que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS). Es más, los datos en Europa no sobrepasan el 25% de media.

El personal sanitario puede transmitir el virus de la gripe a los pacientes durante el período de incubación o durante la fase de infección subclínica, por lo que los trabajadores sanitarios en contacto con enfermos deberían vacunarse cada año, antes del inicio de la temporada gripal. Además, la transmisión del virus gripal en el medio sanitario es uno de los principales motivos de absentismo laboral. El programa de vacunación antigripal incluye a todos los trabajadores.

El personal sanitario puede transmitir el virus de la gripe a los pacientes durante el período de incubación o durante la fase de infección subclínica, por lo que los trabajadores sanitarios en contacto con enfermos deberían vacunarse cada año, antes del inicio de la temporada gripal

Una vez más, las campañas recuerdan que el personal sanitario está en riesgo de contagio de ciertas enfermedades evitables, como la gripe, mediante vacunación, a la vez que pueden ser fuente de contagio para los pacientes a su cuidado y para sus compañeros de trabajo. Hay que señalar que anualmente entre 2.000 y 3.000 personas mueren cada año a causa de la gripe, y esa cifra se podría reducir a la mitad solo gracias a las vacunas.

A pesar de que existen estrategias diseñadas para mejorar la cobertura, solo las políticas de inmunización obligatoria que consideran la inmunización como un deber y no como una elección personal han conseguido elevar significativamente la tasa de vacunación. De hecho, en algunos centros sanitarios de Estados Unidos donde se ha aplicado la medida, la cobertura ha superado el 90%.

 En España, estudios llevados a cabo desde el año 2001 ponen de manifiesto que la cobertura de vacunación contra la gripe pasa del 16% en médicos al 11% en ATS

EN EUROPA

Menos fidelizados con la medida se encuentran los profesionales sanitarios europeos. Un estudio de la Universidad de Lovainadel que se hace eco la Sociedad Española de Directivos de la Salud (Sedisa) establece un promedio anual de vacunación de los sanitarios entre el 15% y el 25%, una cifra muy lejana al 75% que la Organización Mundial de la Salud recomienda en grupos de riesgo, como es el caso del personal sanitario.

En dicho promedio existen extremos, como en el caso de Francia, donde se estima que se vacuna entre el 30% y el 40% de los profesionales. En España, estudios llevados a cabo desde el año 2001 ponen de manifiesto que la cobertura de vacunación contra la gripe pasa del 16% en médicos al 11% en ATS. Las causas más frecuentes de la escasa adherencia van desde la errónea apreciación de la eficacia vacunal, posiblemente relacionada con la confusión que infunde frente a otras infecciones de tipo respiratorio que se diagnostican como “cuadros gripales”, la baja percepción del riesgo de enfermar que existe entre los trabajadores sanitarios y la banalización de su trascendencia clínica, así como el olvido de entender la gripe como una posible infección nosocomial en la que los trabajadores sanitarios pueden intervenir como transmisores. Es de destacar, en este sentido, que el 75% de los trabajadores sanitarios con síntomas de gripe continúa trabajando mientras está enfermo. 

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
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