El ministro de Ciencia, Innovación y Universidad, Pedro Duque, y la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar, María Luisa Carcedo, no le van a poner las cosas fáciles a los 'gurús' de la pseudociencias este próximo año. La ofensiva del Gobierno de Pedro Sánchez en la lucha contra las pseudoterapias iniciada por la exministra Carmen Montón sigue adelante y todo parece indicar que se recrudecerá algo más.
Se prevé un endurecimiento en las acciones dirigidas a esta lucha. Tal y como ha anunciado Duque en una entrevista a Europa Press, a partir de enero se promoverá una campaña que para dar difusión al Plan para la Protección de las Personas frente a las Pseudoterapias, presentado el pasado mes de noviembre.
A partir de enero, una campaña en redes sociales y medios pondré el enfoque en las pseudoterapias y en "qué está basado en hechos reales y qué no"
Mediante publicidad a través de redes sociales y medios de comunicación, se dará comienzo así a una guerra abierta contra las pseudociencias. Esta primera campaña centra el enfoque en "qué está basado en hechos reales qué no", como ha explicado el ministro y astronauta Pedro Duque.
Duque también ha adelantado que su ministerio creará un registro online donde se publicarán todas las plazas que vayan saliendo en universidades y centros de investigación en España con el objetivo de facilitar la vuelta de los investigadores españoles que se encuentran trabajando en el extranjero.
PUESTA EN MARCHA DEL PLAN
El plan, elaborado junto con el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, cuenta con distintas líneas de actuación. El objetivo de esta iniciativa es proteger la salud como derecho básico frente a las sustancias, productos, actividades o servicios con pretendidas finalidades sanitarias que no tienen evidencia ni conocimiento científico suficiente que avale su eficacia y seguridad. Además, incluye medidas para evitar que las pseudociencias se impartan en las universidades españolas.
Uno de los objetivos del plan consiste en eliminar de los centros sanitarios la práctica de las pseudoterapias, así como garantizar que todas las actividades sanitarias se realicen por parte de profesionales que dispongan de la titulación oficialmente reconocida. También contempla modificaciones normativas para evitar la publicidad engañosa. Estos cambios reforzarán los mecanismos de control existentes para evitar la promoción comercial de prácticas que no estén amparadas por el conocimiento científico en ámbitos como internet, redes sociales, actos o jornadas.