El PSOE aspira a impulsar, “ahora sí”, su modelo sanitario tras el 10-N

Los resultados del 10-N determinarán si Pedro Sánchez volverá a dirigir la política sanitaria de España. La regulación de la eutanasia, la salud bucodental o la eliminación del copago farmacéutico son sus principales apuestas.

Pedro Sánchez, secretario general del PSOE y candidato a ser reelegido presidente (Foto: Flickr PSOE)

Este domingo, 10 de noviembre, se vuelven a celebrar en España elecciones generales, casi siete meses después de las que hubo en abril y que acabaron en fracaso al no formarse Gobierno. Pese al tiempo que ha pasado, todo parece indicar que será difícil desmontar el actual bloqueo, a tenor de lo que ocurrió en el debate electoral del lunes en el que la sanidad se convirtió en un arma arrojadiza más entre los distintos candidatos.

En este escenario, Pedro Sánchez y el PSOE se sitúan como el rival a batir. Todas las encuestas les sitúan como el partido con más probabilidad de ganar. No obstante, dependerá del resultado del resto de formaciones la posibilidad de que pueda volver a formar Gobierno. Asimismo, las posteriores negociaciones determinarán si repite de nuevo María Luisa Carcedo como ministra de Sanidad o se renuevan los cargos.

Los socialistas apuestan por invertir el 7% del PIB en sanidad hasta el 2023, aunque dependerá de la evolución de la economía

Para esta nueva convocatoria electoral, los socialistas se presentan con un programa electoral prácticamente parecido al de abril. La principal característica es que al haberse reducido, se centra en las principales banderas sanitarias que llevan defendiendo en los últimos meses.

Es el caso de la regulación de la eutanasia, la incorporación de la salud bucodental en la cartera de servicios del SNS y la eliminación del copago farmacéutico para colectivos vulnerables. De hecho, estas fueron las únicas menciones sobre sanidad que hizo Sánchez en el debate electoral de principios de semana. Junto a estas, que son las más repetidas, podría incluirse el aumento de la inversión en el ámbito sanitario. El PSOE aspira a que suponga el 7% del PIB en 2023, aunque dependerá de la evolución de la economía.

UNIVERSALIDAD, SALUD MENTAL Y TERAPIAS AVANZADAS

El programa electoral del PSOE recoge también otras acciones sanitarias como la implementación del Marco Estratégico de Atención Primaria, el cumplimiento de la efectividad de la sanidad universal, el refuerzo de las políticas contra el tabaquismo o la lucha contra la ludopatía a través de la regulación de la publicidad de los juegos de azar y las apuestas en línea.

En el tintero se han quedado propuestas anteriormente impulsadas por el PSOE como la transferencia de la sanidad penitenciaria o el debate sobre el cannabis terapéutico

Otras iniciativas dirigidas a mejorar la atención a los pacientes son la actualización de la Estrategia de Salud Mental que recoja un protocolo sobre el suicidio, la atención al cáncer infantil y adolescente, el impulso del Plan para el Abordaje de las Terapias Avanzadas o el refuerzo de la ciencia y la investigación para combatir las pseudoterapias y los movimientos antivacuna. También defenderán un Plan de Salud y Medio Ambiente e impulsarán nuevas medidas sobre salud sexual y reproductiva.

EN EL OLVIDO

A pesar de este listado de propuestas sanitarias, la formación que dirige Pedro Sánchez ha dejado en el tintero otras que sí defendió en anteriores programas. Por ejemplo, ya no hace mención a abordar el proceso de transferencia de la sanidad penitenciaria a las comunidades autónomas. Tampoco dice nada sobre el cannabis terapéutico, pese a que anteriormente propusieron constituir una comisión de estudio para “debatir en profundidad sobre el conocimiento del cannabis y sus efectos sobre la salud”.

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