Las reacciones al proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) que el Gobierno ha ideado para el 2023 no se han hecho esperar. Refiriéndonos a las del ámbito sanitario, ya hay voces del sector que consideran escasas alguna de sus partidas. En concreto, han puesto el foco sobre el dinero que se destinará a AtenciónPrimaria.
Uno de los primeros organismos en pronunciarse ha sido la Federación de Asociaciones en Defensa de la Sanidad Pública (FADSP), desde donde han tildado de “claramente insuficiente” el porcentaje que el Ministerio de Sanidad destina al primer nivel asistencial en el marco de estas nuevas cuentas públicas.
La Fadsp reprocha que a Atención Primaria “se destina un 11,06% del presupuesto para políticas de Sanidad y un 20,16% del presupuesto del Ministerio de Sanidad”
Según este proyecto de PGE, el departamento que lidera Carolina Darias ha incluido una partida de 434 millones de euros para reforzar las infraestructuras y renovar equipos en Atención Primaria así como 173 millones para que las comunidades autónomas puedan implementar el Marco Estratégico de Atención Primaria y Comunitaria.
Pese a este despliegue, la Fadsp reprocha que a Atención Primaria “se destina un 11,06% del presupuesto para políticas de Sanidad y un 20,16% del presupuesto del Ministerio de Sanidad”.
En esta línea, este organismo subraya que aunque “es evidente” que la mayor parte de los servicios de sanidad pública cuentan con presupuestos que proceden de las comunidades autónomas, “los presupuestos son un indiciodelasensibilidad de un Gobierno sobre un tema concreto”.
“AVANCE EXIGUO”
A nivel general, la Fadsp apunta que aunque el presupuesto del Ministerio de Sanidad ha aumentado un 6,4% con respecto al año anterior, teniendo en cuenta los fondos europeos, si solamente se analizan los fondos nacionales “estos tienen una disminución del 14,7%”.
Esta asociación lamenta que planes de "gran impacto mediático" como el de salud bucodental o el de salud mental van a recibir "cantidades escasas para los objetivos planteados"
Por otra parte, destaca que de los 7.049 millones previstos para políticas sanitarias, una buena cantidad, 1.116 millones, es para adquirir vacunas para administrar la segunda dosis de refuerzo frente al Covid-19. A ello hay que sumar 200 millones de euros más para financiar el fondo Covax.
Igualmente, lamentan que para planes que han tenido un “gran impacto mediático” como el de saludbucodental o el de saludmental, reciben “cantidades escasas para los objetivos planteados”, con 44 millones y 16 millones, respectivamente. Y, mientras, el mutualismo administrativo recibirá 2.477 millones de euros, rechazando que “van a ir destinados mayoritariamente a favorecer al sector privado”.
Como conclusión, la Fadsp valora que a pesar de que se produce “un aumento en el presupuesto por encima del global de los PGE”, este crecimiento se produce “gracias a los fondos europeos”. Por el contrario, lamentan el “insuficiente esfuerzo” sobre la Atención Primaria y sobre otros programas estrellas, “un avance exiguo que no se corresponde a las necesidades de salud de la población”.