El cambio climático incrementa la movilidad geográfica de las enfermedades infecciosas

El incremento de las temperaturas y los fenómenos meteorológicos adversos consecuencia del cambio climático cambian los patrones de contagio de algunas enfermedades infecciosas.

Mosquito (Foto. Freepik)
2 diciembre 2019 | 17:45 h

Del 2 al 13 de diciembre Madrid será el epicentro global sobre las consecuencias y lucha contra el cambio climático con motivo de la celebración de la Cumbre del Clima de Naciones Unidas. La Humanidad ha llevado al planeta a un punto que cada vez se encuentra más cercano al no retorno. Ha comenzado la cuenta atrás. Ahora es el momento de afrontar la crisis climática.

La ONU insta de forma urgente a todos los países a que impulsen el desarrollo de planes nacionales. Representantes procedentes de casi 200 países se reúnen en la capital española para profundizar en las negociaciones que deberían hacer eficiente y efectivo de una vez por todas el Acuerdo de París. Este fue rubricado en 2015 y se erige como el primer pacto a nivel global contra el calentamiento del planeta.

El cambio climático no solo está modificando nuestro entorno y perjudicando a la biodiversidad que nos rodea. Sus efectos tienen preocupantes consecuencias sobre nuestro estado de salud. Especialmente en el caso de los más pequeños.

FENÓMENOS METEOROLÓGICOS Y ENFERMEDADES INFECCIOSAS

El mejor ejemplo lo encontramos en el incremento de las enfermedades infecciosas en los últimos años. La malaria, el cólera o el dengue han experimentado alarmantes repuntes en las zonas tropicales de las que son endógenos.

Enfermedades como el dengue podrían romper sus barreras geográficas habituales y causar brotes en zonas templadas como América del Norte o Europa, de acuerdo a los expertos.

Y es que el incremento de la temperatura, las lluvias o la humedad favorecen la proliferación y expansión de los mosquitos portadores de virus o parásitos que originan, respectivamente, el dengue o la malaria.

Y la situación irá a peor si no se toman medidas. Un niño que nace hoy en el mundo crecerá respirando aire contaminado. Algo que perjudica seriamente su salud. Los niños son uno de los grupos de riesgo según revela el informe “Countdown on Health and climate change”, publicado por la revista The Lancet.

Se trata de una investigación desarrollada de forma conjunta por 35 instituciones entre las que se encuentran la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Banco Mundial, la University College de Londres y la Universidad de Tsinghua en China.

Su propósito es el de exponer las consecuencias perjudiciales del incremento de las temperaturas en la salud de los niños, sobre todo si no se toman medidas para frenar el cambio climático.

“Aún no somos conscientes sobre cómo se ven estos problemas desde la perspectiva de la salud, pero sabemos que será catastrófico”

El doctor Nick Watts, director ejecutivo de "The Lancet Countdown", señala que el daño que se causa durante la etapa de desarrollo de los niños es permanente en su vida. “Los niños son más vulnerables a los riesgos sanitarios de un clima en proceso de cambio, sus sistemas inmunológicos aún se están desarrollando, lo que les hace más susceptibles a las enfermedades y a la contaminación”.

“Aún no somos conscientes sobre cómo se ven estos problemas desde la perspectiva de la salud, pero sabemos que será catastrófico”, asevera Watts, señalando que las consecuencias para la salud del cambio climático “podrían socavar los últimos 50 años de avances en salud pública y saturar los sistemas sanitarios”.

El estudio indica que, a medida que las temperaturas aumenten, los niños serán más vulnerables a problemas como la desnutrición y el incremento de los precios de los alimentos. El informe señala que a lo largo de las últimas tres décadas ha disminuido el potencial del maíz (4%), el trigo de invierno (6%), la soja (3%) y el arroz (4%).

Retomando las enfermedades infecciosas, los jóvenes son uno de los grupos más afectados por su incremento. Durante el pasado año se duplicó el número de días en los que el clima favorecía la propagación de la bacteria Vibrio, responsable de la diarrea.

No podemos olvidarnos de la calidad del aire. Los niveles de contaminación crecen en las grandes ciudades y ya es un problema de salud pública para muchos países. En 2016 se produjeron más de 2,9 millones de muertes prematuras causadas por la contaminación del aire. El estudio apunta a que más de esas 440.000 muertes fueron consecuencia directa de las emisiones de carbón.

¿CREA EL CAMBIO CLIMÁTICO NUEVAS ENFERMEDADES?

Una de sus mayores preocupaciones es el hecho de que el cambio climático está avanzando de forma más veloz que la capacidad de respuesta de los gobiernos.

El problema reside en que los mosquitos tropicales se están adaptando a gran velocidad a su nueva vida en zonas templadas y pueden picar a las personas portadoras de patógenos. Un preocupante ejemplo lo encontramos en los casos aislados de dengue que se han reportado en Europa así como la instalación del mosquito en el Levante español.

“El aumento de las sequías, el calor y las inundaciones ya están dificultando el cultivo de alimentos en algunas zonas, y los bebés y los niños a menudo son los más afectados por la escasez de alimentos. Un clima más cálido hace posible que los patógenos vivan más, causando diarrea que puede matarlos. Los mosquitos que transmiten enfermedades como el dengue se están extendiendo a áreas donde la enfermedad no existía en el pasado”, recoge el estudio en este sentido.

"Estamos viendo una tendencia de enfermedades transmitidas por vectores como la Chikungunya y algunas otras que antes solo escuchábamos en el Caribe"

“El cambio climático está aumentando el riesgo de contraer dengue, transmitido por los mosquitos Aedes aegypti y Aedes albopictus. Esto se debe a una serie de factores entre los que se encuentran las fluctuaciones de las temperaturas altas y bajas. Nueve de los 10 años más propensos para la transmisión del dengue pertenecen a la última década”, según el estudio.

Pero el dengue no es la única preocupación. En el caso de Estados Unidos por ejemplo, “estamos viendo una tendencia de enfermedades transmitidas por vectores como la Chikungunya y algunas otras que antes solo escuchábamos en el Caribe”, apunta el documento.

EL ACUERDO DE PARIS: LA GRAN SOLUCION

La Conferencia de París sobre el Clima (COP21) se celebró en diciembre de 2015 con la firma de 195 países de este primer acuerdo global vinculante sobre el clima. El objetivo principal de este es evitar el cambio climático.

Para ello establece un plan de acción mundial que pone el límite del calentamiento global muy por debajo de dos grados centígrados sobre los niveles preidustriales según informa la Unión Europea.

"La crisis climática es una de las mayores amenazas para la salud de la humanidad hoy en día, pero aún no se ha visto una respuesta contundente de los gobiernos. Una respuesta que esté a la altura del desafío al que se enfrenta la próxima generación”, recalca el doctor Rick Horton, editor jefe de The Lancet.

Este aboga por la defensa del Acuerdo de París como mecanismo para limitar el calentamiento global. De lograrse su efectivo cumplimiento, los bebés que hoy naciesen en el mundo vivirán en un planeta con cero emisiones en un plazo de 31 años.

"El cambio climático es una emergencia global en términos de salud"

El informe destaca que, si el calentamiento global no se detiene y continúa avanzando al ritmo actual, los niños que nazcan hoy se enfrentarán a un mundo con una temperatura incrementada en cuatro grados sobre la actual en su 71 cumpleaños.

Durante toda esta etapa las la prevalencia y expansión geográfica de muchas enfermedades crecerá mientras se reduce la producción de alimentos básicos como consecuencia de las sequías y los fenómenos climatológicos adversos. Un escenario en el que los bebés que nazcan hoy, si no hacemos nada por evitarlo, se enfrentarán a continuos riesgos para su salud en todas y cada una de las etapas de su vida.

“Estamos ante numerosas oportunidades. Tenemos las soluciones y los tratamientos. Solo necesitamos implementarlos con urgencia y audacia. El cambio climático es una emergencia global en términos de salud. Necesitamos asegurarnos de ponemos en marcha todas las soluciones posibles para poder proteger mejor nuestra salud”, concluye el informe.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.